Los fiscales afirman que el coacusado fugitivo Raúl Gorrín habría intimidado a un posible testigo revelado por la defensa de Claudia Díaz.
Redacción | Primer Informe
A pocas jornadas para que inicie el juicio contra Claudia Díaz, conocida por haber sido enfermera de Hugo Chávez, otro de los acusados, Raúl Gorrín, se hace presente en el juicio a pesar de su condición de fugitivo de la justicia norteamericana.
Según un tuit del reportero de The Associated Press (AP), Joshua Goodman, Gorrín estaría calentando las vísperas del juicio contra quien también fue Tesorera de Venezuela durante el último gobierno del caudillo militar.
Raúl Gorrín, el magnate chavista, dueño del canal de noticias Globovisión, también aparece como coacusado en la trama de lavado de dinero y corrupción por la que se enjuicia a Díaz y a su pareja Adrián Velásquez, quien fue recientemente extraditado desde España a los Estados Unidos.
Según indicó el periodista de AP, «los fiscales afirman que un coacusado fugitivo -probablemente el magnate de los medios de comunicación Raúl Gorrín- intimidó a un posible testigo del gobierno».
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Case against Hugo Chavez’s ex nurse Claudia Diaz heats up on eve of trial.
Prosecutors claim a fugitive co-defendant—likely media mogul Raúl Gorrin—of intimidating a potential government witness.
In new filing, they suggest Diaz’s attorney outed the unnamed witness. pic.twitter.com/GIEEMwdaQV
— Joshua Goodman (@APjoshgoodman) October 14, 2022
Indicó que la información surgió de una nueva presentación en la que «sugieren que el abogado de Díaz reveló al testigo no identificado».
La presentación detalla como la fiscalía se enteró que «un coacusado fugitivo contactó con un testigo identificado a través de un tercero. Según el testigo, el propósito del contacto era determinar si el testigo estaba realmente declarando y por qué lo hacía. El testigo tomó el contacto no solicitado como un acto de intimidación para que no testificara».
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«Dado que este testigo sólo se identificó ante el abogado de la acusada Claudia Patricia Díaz Guillen en cumplimiento de una orden judicial y que nunca se ha mencionado en ninguna información pública relativa a este caso penal como posible testigo de los EE.UU. sobre la base de la revisión por parte de los EE.UU. de la información pública o en cualquier archivo público o registro asociado a este caso, y que los nombres de los posibles testigos se consideran información delicada sujeta a la Orden de Protección dictada en este caso, los EE.UU. tienen serias dudas sobre este contacto con el testigo», continúa la comunicación.
Ante esto la fiscalía solicitó que el Tribunal «celebre una conferencia sobre el estado de la causa para que las partes puedan informar más al Tribunal sobre el contacto inapropiado a fin de determinar qué precipitó el contacto y para que el Tribunal considere cualquier acción apropiada».
De acuerdo con la Regla Local 88.9, los EE.UU. y el abogado de la acusado han intercambiado correos electrónicos en relación con la presente moción, y el abogado de la acusada ha indicado que no se opone a la solicitud de una conferencia de estado. Además, el abogado del demandado informó a los EE.UU. de que «no adoptan ninguna posición porque esta cuestión no tiene nada que ver con nosotros ni con nuestros clientes».
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