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Clientes de la empresa comercializadora de oro de Allen Stanford recuperarán la posesión de USD 21,2 millones en barras y oro amonedado incautados hace 11 meses en la sede de la compañía de Houston, cuando los reguladores federales allanaron las oficinas del Grupo Stanford, reportó el Houston Chronicle.
Los inversores habían instado al Juez de Distrito de David Godbey a liberar su oro en vista de que los precios del metal alcanzaron un máximo histórico en 2009.
«Las monedas y lingotes que se han marcado individualmente y se almacenan para 147 clientes» serán devueltos a sus propietarios, sentenció Godbey ayer. «El oro que había sido pagado en su totalidad por 70 clientes y no les había sido entregado también será liberado», sentenció Godbey.
Por otra parte, los abogados de Stanford apelaron la decisión de Godbey de negarle nuevamente libertad bajo fianza. La apelación se decidirá en la Corte de Apelaciones de Nueva Orleans. Stanford se encuentra al borde de un «colapso nervioso» a causa de su encarcelamiento, dijeron sus abogados.
Tomado de Los clientes de Stanford reciben migajas post-navideñas