Bueno amigos, parece que no puedo dejar de denunciar las locuras del presidente elegido por más de 7 millones de mis compatriotas. Mientras dormitaba hoy escuché fragmentos del discurso del presidente Chávez durante la ceremonia de juramentación de sus nuevos 27 ministros -no olvidemos que comenzó en 1998 con 12… En todo caso estaba tratando de poner algo de carne detrás de ese duro -para definir el concepto conocido como “socialismo del siglo XXI”. Hasta este momento sus secuaces han tenido dificultades para explicar qué significa, por lo que el propio presidente tuvo que explicarlo, por lo que «socialismo del siglo XXI» -según el presidente Chávez- significa:
1. Desechar la autonomía del banco central.
2. Nacionalizar la CANTV (empresa de telecomunicaciones) y la industria eléctrica.
3. Cambiar el código/leyes comerciales;
4. Cancelar la licencia de transmisión de la cadena de televisión más grande de Venezuela (RCTV).
5. Buscar poderes especiales del Congreso para aprobar nuevas leyes “revolucionarias” -solo Chávez sabe lo que significa “revolucionario”…
6. El Estado debe tener una participación mayoritaria en las empresas conjuntas de mejoramiento de petróleo pesado en la cuenca del Orinoco.
Los seis puntos, parte de un resumen de Goldman Sachs, son indicativos del tipo de ‘socialismo’ que tiene en mente Chávez. Sin embargo, el punto número tres necesita más explicación. El nuevo ministro de Hacienda, Rodrigo Cabezas, anunció que a partir de ahora se toparán las ganancias de las empresas privadas para poder aumentar los presupuestos de salud y educación. En resumen, el gobierno venezolano presumiblemente regulará los márgenes de ganancia -y obviamente tomará un mayor recorte de impuestos- para que las empresas que operan en Venezuela puedan aumentar las contribuciones para financiar proyectos gubernamentales. Entonces, en lugar de garantizar un clima estable para la inversión, los nuevos inventores del socialismo eliminarán unilateralmente los contratos con las corporaciones privadas e impondrán nuevos términos de participación en los acuerdos existentes y supuestamente perfectamente legales, como se sugiere en el punto seis. No hace falta decir que las acciones de CANTV -parcialmente propiedad de Verizon- cayeron en NYSE. «Todo lo que fue privatizado debe ser nacionalizado», dijo el presidente Chávez, quien incluyó en la campaña de nacionalización a las empresas eléctricas que han sido de propiedad privada desde su constitución.
Todo era ‘socialismo’ en el discurso del presidente Chávez. Por ejemplo, se refirió al secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, como «pendejo», un término cariñoso usado por los neosocialistas que significa «idiota». Por fin hizo un uso adecuado del lenguaje para referirse a un hombre que parece convencido de que todo está bien y elegante en este país socialista.
El presidente Chávez también se comprometió a enviar literatura sobre socialismo -escrita por personajes como Marx y Stalin- a los jerarcas de la Iglesia para que puedan aprender de qué se trata su ‘Socialismo del Siglo XXI’.
A saber, los venezolanos deben sentirse agradecidos de que el presidente Chávez se haya tomado la molestia de aclarar los objetivos de su proyecto. De hecho, estos objetivos son novedosos, especialmente la construcción de una construcción hegemónica que anulará la competencia, la disidencia, los derechos y las libertades inalienables.