En detrimento de los municipios, el Ejecutivo administrará un fondo para el desarrollo endógeno
El Gobierno venezolano financiará proyectos de desarrollo endógeno a través de un impuesto petrolero que le quita recursos a los municipios, tras modificarse el acuerdo de creación de empresas mixtas publicado en la Gaceta Oficial del lunes 28 de septiembre número 39.773.
En la norma se establece que los fondos irán a un Fondo Especial para el «poder popular» el cual será administrado directamente por el Ejecutivo.
Chávez asegura que su «revolución socialista» busca darle más poder al pueblo a través de lo que llama consejos comunales, grupos de ciudadanos organizados que están asumiendo pequeñas funciones de gestión pública, como reparar escuelas y administrar estaciones de servicio, informó Reuters La modificación legal contempla que del impuesto (regalía adicional) del 3,33% que pagan las empresas mixtas petroleras, 2,22% irá destinado a financiar el «poder popular» y 1,11% se repartirá entre todos los municipios petroleros del país, un cambio en la correlación financiera.
Los consejos comunales van a proponer los proyectos. «Lo bueno es que, además, se priorizarán obras en los municipios con menor índice de desarrollo humano», dijo a Reuters el presidente de la Comisión de Energía y Minas de la Asamblea Nacional, Ángel Rodríguez.
Anteriormente, sólo 1,11% era destinado a desarrollo social, mientras que el resto se asignaba a los municipios dentro del área de influencia de estos proyectos petroleros, que fueron nacionalizados por Chávez en 2006.
Cuando el Estado tomó el control accionario de los convenios operativos que administraban petroleras privadas, los impuestos municipales que pagaban fueron reemplazados por una regalía extra que estaba siendo distribuida como parte del presupuesto ordinario de la nación.
Según Rodríguez, entre septiembre de 2006 y diciembre de 2008, los municipios petroleros recibieron 792,45 millones de bolívares (unos 370 millones de dólares), lo cual consideró una «distorsión».
Tras 10 años en el poder, el primer mandatario conserva elevados niveles de popularidad en el país petrolero por sus multimillonarios programas sociales en alimentación, salud y educación, envueltos en un discurso de inclusión y justicia social.
«Con estos ingresos se optimizará la inversión social que se hace con la renta petrolera», aseguró el diputado de la Asamblea Nacional.
El Gobierno ha ensanchado los ingresos para todo aquello relacionado con el «poder popular».
Los críticos cuestionan la discrecionalidad oficial en el manejo de estos fondos.