Convenios internacionales desangran a PDVSA

VenePirámides 

La producción petrolera de los seis años que constituyen el nuevo período gubernamental está atada a la obligación que asumió el gobierno de Hugo Chávez de obtener préstamos ­principalmente de China- a cambio de suministros de crudo o combustibles. También a los convenios de cooperación suscritos con varios países de América Latina y el Caribe. Todos estos acuerdos merman los ingresos de Petróleos de Venezuela.

Para 2013 están comprometidos 772.000 barriles diarios, que equivale a la cuarta parte de la producción del país, asumiendo la cifra oficial de 3 millones de barriles por día, y abarcan 31% del volumen de 2,4 millones de barriles que a diario exporta la petrolera.

La situación implica que Pdvsa dejará de percibir cerca de 2,3 millardos de dólares mensuales tomando en cuenta un precio promediode 100 dólares por barril, lo que anualmente representa 27,7 millardos de dólares que la empresa no cobrará o cuyo cobro debe postergarse sin que entren en el esquema tradicional de una factura comercial en el área de hidrocarburos.

El volumen comprometido con estos acuerdos cae ligeramente a 748.000 barriles diarios en 2014 y se reduce a un promedio de 411.000 barriles al día entre 2015 y 2019, según cifras de la firma de consultoría energética IPD Latinoamérica, la cual toma como base la data difundida por Pdvsa.

Las cifras pueden variar dependiendo de que se incrementen los despachos con futuras negociaciones, se amplíen los suministros o créditos atados al pago de petróleo.

Hasta el momento se circunscriben principalmente a los préstamos otorgados por el Banco de Desarrollo de China y el Banco Japonés de Cooperación Internacional, así como los barriles que están asociados a los tratados internacionales como Petrocaribe, el Acuerdo de Cooperación Energética de Caracas y el Convenio Integral de Cooperación. 

Expertos en materia petrolera, del país y del exterior, han señalado que uno de los aspectos que debe revisarse de la política petrolera es vinculado a los problemas que generan estos convenios en el flujo de caja de Pdvsa, y que se suman a las otras obligaciones fiscales que el Ejecutivo le ha impuesto a la petrolera como los traspasos al Fondo de Desarrollo Nacional.

«En Pdvsa hay problemas de ejecución, falta de recursos humanos especializados, pero la principal variable es la excesiva extracción de recursos por parte del Gobierno hacia el Fonden, programas sociales que Pdvsa ejecuta directamente, Petrocaribe o como ocurre con el Fondo Chino, con el cual la compañía debe utilizar su flujo de caja para repagar el crédito», advirtió a mediados de año el economista Francisco Monaldi, director del Centro de Energía y Ambiente del Instituto de Estudios Superiores de Administración. «Todo esto hace que Pdvsa tenga un flujo de caja muy escaso en el momento que se registran los precios más altos de la historia en términos reales», añadió.

Hasta finales del año pasado sólo había la hipótesis del peso financiero que debía cargar Pdvsa por los préstamos de 32 millardos de dólares que el BDC concedió al Gobierno, y que comúnmente son denominados dentro de lo que se llama el Fondo Chino. En noviembre de 2011, no obstante, hubo mayor claridad sobre esta materia cuando el diputado de oposición Miguel Ángel Rodríguez reveló un presunto punto de cuenta de abril de ese año y en el cual el ministro de Petróleo y Minería, Rafael Ramírez, alertaba al presidente Hugo Chávez sobre el saldo negativo que registraba la empresa en su flujo de ingresos.

«Durante 2008 y 2009 los volúmenes de crudo y productos correspondientes a los despachos para el pago del fondo se consideraban como pago de regalía en especie por parte de Pdvsa. Sin embargo, a partir del 1° de enero de 2010 se dejaron de rebajar estos volúmenes del pago de regalía», señala el punto de cuenta. «En consecuencia, el impacto financiero total de estos despachos para 2011 en el flujo de caja de Pdvsa ascendía a 18,4 millardos de dólares, compuesto por los costos de producción y refinación, pago de regalías e impuesto de extracción y las ventas que no ingresan a caja», agrega el reporte que Ramírez le habría enviado al primer mandatario.

El documento tenía por finalidad que el Presidente aprobara la utilización de la porción de dinero que corresponde a Pdvsa, que está en cuentas del Banco de Desarrollo Económico y Social de Venezuela. Todo indica que Chávez avaló la decisión porque de puño y letra aparece la palabra «proceder» y con su tradicional «rabo e’cochino» ­como él califica su firma- instruye a la presidenta del Bandes, Edmée Betancourt, a desembolsar el dinero.

En una entrevista que el ministro concedió a El Nacional a finales de agosto de 2012 fue consultado sobre la veracidad del referido punto de cuenta. A lo que el funcionario respondió: «No sé qué documento es ese», pero posteriormente admitió que «el tema existió» cuando se le repreguntó si ciertamente había hecho el planteamiento al Presidente.

«Entregamos a nombre del Estado esa producción petrolera para pagar, pero el excedente ­una vez que se cancela el monto establecido- viene a Pdvsa. Por supuesto, si no viniera nos crearía un problema y eso es lo que están tratando de explotar», explicó Ramírez.

«El Bandes paga el préstamo al BDC y envía a Pdvsa lo que resta y con eso se cubren las operaciones. Eso para nosotros no tiene pérdida», añadió.

Las cifras más recientes difundidas por el ministro señalan que a China están despachando 640.000 barriles diarios, de los cuales 60% está compuesto por combustibles como el fuel oil y el restante 40% por crudo mejorado para el procesamiento en las refinerías de ese país.

De esa cantidad, cerca de 18,7% estaría comprometido con el Fondo Chino, lo que implica un volumen de 120.000 barriles por día, aproximadamente.

Todo indica que el problema de los ingresos que no cobra Pdvsa por los préstamos chinos fue resuelto parcialmente, pero persisten las dudas sobre la celeridad que tiene el Bandes en transferir los excedentes que corresponden a la estatal, de allí que en la empresa haya la intención de revisar los mecanismos de pago o se incremente la producción y la exportación para tener alternativa al comercializar los crudos y productos refinados, según reportó el diario El Nacional.

Tomado de Convenios internacionales desangran a PDVSA