La Policía española arrestó en Madrid a Rafael Alfredo Sarría Díaz, presunto testaferro chavista, por un conflicto familiar. Si bien la detención se produjo hace exactamente dos meses -el 30 de septiembre-, recién se conoció en las últimas horas tras una publicación del medio español El Confidencial.
El caso amenaza al régimen venezolano dado a que, siguiendo al periódico citado, el yerno de Sarría advirtió en su denuncia de que cuenta con “información confidencial” debido a la “cercanía” de su suegro con funcionarios venezolanos. Sarría fue sancionado por Estados Unidos en 2018, reseñó Infobae.
Respecto a las compañías apuntadas, se trataba de 11420 Corp., Noor Plantation Investments y Sai Advisors, todas con sede en Florida y vinculadas a Sarría, según recordó El Confidencial.
El medio español consignó que Sarría vive en Madrid desde hace años y que la justicia española mantiene varias líneas de investigación por blanqueo de capitales sobre ciudadanos venezolanos, muchos de ellos afectos al régimen de Venezuela.
En concreto, se los señala por haberse enriquecido gracias a la corrupción en su país y su posición privilegiada, y haber invertido sus fortunas en propiedades inmobiliarias en España. Sin embargo, fuentes de la Fiscalía Anticorrupción y la Audiencia Nacional confirmaron a El Confidencial que no tienen ninguna causa abierta contra Sarría en la actualidad.
El periódico citado informó que su detención en Madrid se produjo por un conflicto familiar. Todo sucedió el pasado 30 de septiembre cuando, después de las 13:00, efectivos de la comisaría de Fuencarral-El Pardo fueron a una vivienda ubicada cerca del centro comercial La Vaguada.
Habían sido alertados de una fuerte discusión entre dos hombres: estos eran Rafael Sarría, de 56 años; y su yerno, de 30 años, también venezolano. Los detalles de la pelea quedaron recogidos en el atestado 1572/21 al que tuvo acceso El Confidencial.
La hija de Sarría está separándose de su marido, abandonó la casa en la que vivían juntos y se mudó con sus padres a La Moraleja. Se llevó con ella a la hija que tienen en común, siguió el medio citado.
El pasado 30 de septiembre, se trasladó para recoger objetos personales y, cuando tocó el timbre, su todavía marido abrió pensando que la mujer se encontraba sola. Sin embargo, estaba acompañada por su padre, Rafael Sarría, quien ingresó a la vivienda “increpando y amenazando” a su yerno, detalló el diario español.
Según el yerno, Sarría le dijo: “Si sabes lo que te conviene, no te metas en esto, tú no sabes quién soy yo”. Una testigo confirmó la versión.
Infobae publicó en septiembre de 2018 un artículo en el que detalló los bienes del testaferro. Entre ellos, había un espectacular avión de 20 millones de dólares que fue incautado en Florida y no sería la única propiedad que Rafael Alfredo Sarria Díaz estaría escondiéndole a las autoridades de Estados Unidos.
De acuerdo a lo publicado en su momento, se encontraron 14 lujosas propiedades vinculadas al testaferro, ubicadas en al menos tres países y que se habrían adquirido con recursos ilícitos que llevaron a Washington a abrirle un expediente en la temida Lista Clinton.
Dos de esos inmuebles, que están a nombre de Sarría Díaz, se encuentran en exclusivas zonas de Florida y Nueva York. Uno es un condominio en Boca Ratón y el otro fue hallado en pleno corazón de Manhattan.
El diario El Tiempo estableció en 2018 que se trataba de las firmas SAI Advisors Inc., Noor Plantation Investments LLC y 11420 Corp, que desde por lo menos el 2010 le han servido de fachada al señalado testaferro para adquirir inmuebles, realizar inversiones y hasta explotar nuevos escenarios comerciales en otros países.