Alfredo Miguel Lovera Reyes se define en su perfil de Linkedin como “socio-fundador” de Importexal Corp, pero la descripción de la compañía no incluye la comercialización de alimentos.
“Empresa encargada de la logística y realización de proyectos de trading internacional que destaca por poseer clientes de gama privada y gubernamental que requieren comercializar en grandes cantidades rubros como: juguetes, útiles escolares, material de higiene y limpieza, entre otros”.
En cualquier caso a la empresa le fue bien ya que de un capital inicial de 10.000 dólares saltó a 10 millones de dólares en 2016, reseñó abcnoticias.net.
¿Cómo logró Alfredo Miguel Lovera Reyes incrementar su capital?
Lovera Reyes como buen hijo de la revolución chavista se enchufó a la Inversora Caejer una subsidiaria Caja de Ahorros del Ejército Bolivariano dirigida por el General de brigada, Alfredo Román Parra Yarza, pero con la autonomía de cualquier sociedad privada.
Entre Caejer y las empresas de Alfredo Lovera Reyes recibieron más de 21 millones de dólares según folios de la extinta CADIVI.
Alfredo Lovera Reyes utilizó al menos dos empresas para lavar millones de dólares y enriquecerse, entre ellas Importaciones Almora LLC L10000113685 e Importexal Corp
Alfredo Lovera se exhibe como responsable de la marca de atún que comercializó Inversora Caejer, junto con su compañía Importaciones Almora. “Formada inicialmente para abastecer el mercado nacional y luego creada una marca de atún llamada Mar Caribe, comercializado de manera masiva a nivel nacional debido a su gran calidad”.
En 2015 Importaciones Almora pasó a llamarse Group Almora 21 y se convirtió en una exportadora de alimentos que, entre otros productos, ofrece despachar desde el puerto de La Guaira el atún que antes importó y negoció con Inversora Caejer. La empresa nunca respondió a las peticiones de entrevistas para este reportaje.
Pese a lo publicado por el empresario, un decreto del Ministerio de Salud, publicado en la Gaceta Oficial 39.495 del 25 de agosto de 2010, confirma que la Cooperativa Turmero Azul 657987 obtuvo el registro sanitario para comercializar el atún de marca Mar Caribe “elaborado” por la empresa venezolana Conservas del Centro. Tanto la Cooperativa Turmero Azul 657987 como Conservas del Centro también están conectados con los protagonistas de esta historia: los militares de Inversora Caejer.
El “contralor” de Cooperativa Turmero Azul 657987 es Luis Medina Ramírez, un Mayor General del Ejército que a la postre terminó presidiendo la compañía estatal Corporación Única de Servicios Productivos y Alimentarios (Cuspal), adscrita al Ministerio de Alimentación y responsable de planificar las compras públicas de alimentos en el exterior. Por su parte, los hermanos Faroh Cano, propietarios en Venezuela de Conservas del Centro, adquirieron en junio 2016 a la empacadora ecuatoriana Fishcorp, otra de las proveedoras del atún que en 2014 comercializó Inversora Caejer.
Negocio millonario de Alfredo Miguel Lovera Reyes
Bases de datos del comercio internacional como ImportGenius permiten cuantificar el valor de las importaciones de atún realizadas hace tres años por la compañía de la caja de ahorros del ejército. Sólo en 2014 Inversora Caejer realizó importaciones de atún por al menos unos 7,13 millones de dólares. Ese monto incluye la compra de alrededor de 1,25 millones de kilos del producto, sin los costos del flete y del seguro. En otras palabras, Inversora Caejer pagó 5,69 dólares por cada kilo de atún.
Un año después, en 2015, las compras de atún a Ecuador por parte de los militares sumaron, al menos, 1,8 millones de dólares por 300.000 kilos, a razón de 6,015 dólares por kilo, siguiendo con las estadísticas de ImportGenius. Aunque el Gobierno no ha divulgado las cifras de liquidación de divisas correspondientes a 2015 y 2016, en listados extraoficiales de ambos ejercicios no aparece Inversora Caejer.
Esa irrupción de Inversora Caejer en el negocio del atún coincidió con el súbito auge de las exportaciones de Ecuador para el mercado venezolano que, por una parte, despertaron sospechas entre las autoridades de ese país, y por la otra, dieron inicio al declive de la industria pesquera tradicional venezolana, que alguna vez estuvo entre las mayores del mundo. Partiendo de denuncias del Gremio de Industrias y Procesadores Atuneros, el Ministerio de Comercio de Ecuador llegó a reportar, incluso, que detrás del auge de la venta de atún a Venezuela a partir de 2011 hubo una “sobrevaloración de las exportaciones” y una “concentración del comercio en una sola empresa en desmedro de las tradicionales exportadoras”, según reseñó el portal Plan
Alfredo Lovera también es socio de Eduardo Andrés Capriles Gonzalo con quien perpetró delitos financieros “Guisos en MERCAL y PDVAL.
Otros empresas:
SMB Entreprises Inc, Global Merchandise Distributors Inc o JD & FB Equipment and Supllies LLC, registradas en Florida, Estados Unidos, y pertenecientes a venezolanos recibieron más de $60 millones de dólares con el fin de importar alimentos y maquinarias pero ni el régimen de Chávez ni el de Maduro han publicado los folios en los cuales se registra la entrega de divisas a dichas empresas.