Bancamérica fue constituida en 2015 como parte del Grupo Financiero BOD que integraba además el Allbank de Panamá cuyo accionista mayoritario era el banquero de nacionalidad venezolana, Víctor Vargas Irausquín.
Durante la vigencia del plan se mantuvo una estrecha vigilancia de la entidad y sus operaciones, incluyendo la presencia de supervisores especiales. La entidad no subsanó el incumplimiento principal, relativo a la repatriación de los depósitos mantenidos en una vinculada extranjera, ni aportó capital adicional por lo que fue disuelta conforme a lo estipulado en el artículo 62 de la Ley núm. 183-02.
Vargas, un abogado que ejerció en Venezuela en la década del 70 incursionó al sector financiero en 1982 con la creación del Banco Barinas y llegó a ser considerado como el banquero de Chávez.
Desde sus inicios empezó a ser objeto de investigación por parte de las autoridades financieras de Venezuela y de Estados Unidos quienes le acusaron de delitos financieros.
The Wall Street Journal reporta que para 1990, Vargas tuvo inconvenientes con la Reserva Federal de Estados Unidos por la compra del Capital National Bank de Nueva York. Finalmente, dos de sus socios terminaron en prisión y Vargas pactó su absolución con la condición de pagar una multa de 1,15 millones de dólares y de que no volviera a abrir un banco en los Estados Unidos.
En agosto de 2012, Vargas se ve envuelto junto a Diego Salazar en la polémica de la Explosión en la refinería de Amuay debido a que PDVSA había pagado las pólizas de seguro a su empresa «Seguros La Occidental» pero estas no habían sido emitidas.
Y en 2016 fue interrogado por los ataques cibernéticos al sistema de pagos de Credicard en Venezuela.
A partir de 2019 y en Antigua, La Comisión de Regulación de los Servicios Financieros de Antigua y Barbuda dictó una medida de excepción contra BOI Bank imponiéndole restricciones para realizar algunas operaciones.
Actualmente está prófugo de la justicia panameña tras la quiebra de Allbank una entidad paralela a Promérica y por las mismas razones que en República Dominicana fue disuelta la firma bancaria, desvío de activos.
Según los Pandora Papers, es propietario de la villa La Serenísima, en el complejo turístico Casa de Campo, en La Romana por la que acordó pagar 44 millones de dólares.
Bancamérica registra activos en República Dominicana ascendentes a RD$ 3,577 millones, que representan el 0.13% de los activos totales del sistema y lo colocan en la posición número 31 entre las 49 entidades de intermediación financiera.
La entidad tiene 28,485 depositantes, que representan 0.34% del sistema. Solo 15,260 registran balance en sus cuentas y/o instrumentos de ahorro, con un total de RD$ 3,257 millones. La cantidad de deudores asciende a 5,438, representando el 0.27% del sistema.
Dada la participación de Bancamérica en el mercado, y el hecho de que posee una interconexión mínima con otros participantes, no se prevé riesgo de contagio motivado por su salida.
Como parte del proceso de disolución y conforme a los protocolos reglamentarios, la Superintendencia de Bancos procurará que los activos y pasivos (créditos y depósitos) de Bancamérica sean transferidos a otra entidad de intermediación financiera mediante un proceso de licitación transparente y competitivo, dentro de los próximos 30 días.
La Junta Monetaria ha fijado la cobertura implícita de los depósitos hasta un monto de RD$1,860,000 por depositante. El 98.1% de los depositantes de la entidad tiene ahorros por debajo de este umbral.
Se les informó a los depositantes y acreedores de Bancamérica que a partir del lunes 7 de febrero de 2022 deben acudir a las sucursales del banco a validar sus depósitos y otras acreencias, o hacerlo de manera virtual a través de los canales digitales que la Superintendencia de Bancos pondrá a disposición.
Fuente: Habla.se