Por: Ricardo Avelar
Fuente: El Diario de Hoy – Noticias
A juicio del experto en seguridad hemisférica, el chavismo tiene detrás una mafia organizada que trasciende al gobierno actual y es apoyada por países como Rusia, China e Irán.
Joseph Humire, director ejecutivo del Centro para una Sociedad Libre y Segura, con base en Washington DC. Foto EDH / Jorge Reyes
A dos días de que Juan Guaidó se auto proclamara presidente interino de Venezuela, cerca de 50 gobiernos lo han respaldado como mandatario legítimo y han afirmado que Nicolás Maduro está usurpando funciones. Esta situación inédita puede llevar al chavismo a un punto de no retorno. Sobre eso conversamos con Joseph Humire, experto en seguridad hemisférica y director ejecutivo del Centro para una Sociedad Libre y Segura, con base en Washington DC.
¿Son los eventos del 23 de marzo un punto de quiebre en Venezuela?
El punto de quiebre en Venezuela ya pasó. El pueblo se levantó en 2014 y 2017 y hubo represión total; esta es la última oportunidad para lograr un cambio en el gobierno. El régimen de Venezuela está fortalecido y no solo por actores dentro del país. Tienen apoyo de Irán, Rusia, Turquía, China, el grupo terrorista Hezbollah, etc. Ese es el centro real del poder en Venezuela.
A Guaidó, que es el presidente legítimo según la Constitución, le reconocen cerca de 50 países pero eso no le importa a Maduro, pues él tiene su propio respaldo internacional.
¿En qué se diferencia el respaldo dado a Guaidó con el respaldo internacional a la oposición en el pasado?
Hay más respaldo internacional. Es la primera vez que se reconoce otro presidente, pero eso lleva a un conflicto porque no puede haber dos presidentes en un país, y uno de ellos tiene el control de las fuerzas armadas. Todo el mundo espera saber si estas van a respetar como les manda la Constitución a Juan Guaidó o van a seguir con la corrupción y el narcotráfico de Nicolás Maduro y parece que pasará lo segundo.
Maduro dio 72 horas a los diplomáticos estadounidenses para dejar al país, pero EE. UU. no acatará. ¿Es esta una tensión inédita? ¿Hay posibilidad de confrontación militar?
Si el grupo de Maduro trata de hacer una acción violenta contra Guaidó o intereses estadounidenses, incluyendo la embajada, EE. UU. va a reaccionar, pero creo que no es el interés de Maduro y su círculo hacer una maniobra así tan pronto.
Pero creo que EE. UU. ha respaldado y reconocido a Guaidó y le dará protección y seguridad junto a Colombia y otros países del grupo de Lima porque el presidente interino no tiene las fuerzas armadas.
Ese momento es delicado porque hay una lucha entre quién va a mandar con las fuerzas armadas. El alto mando está comprometido a las actividades ilícitas del régimen pero las segundas y terceras filas no tanto. Habrá que ver si se van a levantar contra Maduro, pero creo que Maduro ya está preparado para este escenario.
El régimen venezolano tiene apoyo de Rusia, Irán, China y grupos como Hezbollah. ¿Es Venezuela una amenaza hemisférica?
Este es el conflicto principal del hemisferio y uno de los más grandes del mundo. Empezó con crisis humanitaria, con gran cantidad de refugiados, luego se involucraron los países que he mencionado y se revelaron las alianzas de Maduro.
Pero Maduro no representa esta fuerza multipolar. El más importante es Tareck El Aissami, exvicepresidente y hoy ministro de Industrias. Él está haciendo alianzas para introducir actores externos y resolver el conflicto en palabras de ellos. Yo miraría mucho hacia Turquía, al presidente Erdogan, cercano a Putin, y quien posiblemente se involucrará en la crisis venezolana para buscar una solución diplomática, pero Erdogan no es de confianza, no es un aliado del mundo occidental y quizá busque extender el conflicto.
¿Qué negociación puede haber?
Hay muchos escenarios donde sale Maduro y nada cambia. Por ejemplo, Erdogan negocia, sacan a Maduro a Turquía y queda El Aissami. Eso es peor. Él ha entregado los recursos naturales de Venezuela a países como Rusia y Turquía. El régimen va más allá de Maduro.
¿Qué mensaje da que El Salvador dé su apoyo total a Maduro?
Es un error estratégico de El Salvador apoyar a Maduro. En este momento ya no hay intermediarios ni área gris en estas alianzas en América Latina: El Salvador tiene que decidir si quiere acercarse a Estados Unidos, con el libre comercio, la democracia y los derechos humanos o quiere alinearse a países como China, que explota; Rusia, que engaña; Irán, que patrocina el terrorismo o la troika de la tiranía: Cuba, Venezuela, Nicaragua.
¿Es probable que dé frutos la proclamación de Guaidó si sus adversarios no juegan bajo reglas democráticas?
El chavismo no respeta normas democráticas o soberanía, que entregó a poderes externos. El juego legal con un régimen al que no le importa es una mala interpretación de la situación. No hay una solución si no salen estos actores externos, tenemos que sacar a Rusia, Irán, China, Turquía para mantener una situación local y regional.
¿Es más probable que la solución sea diplomática o militar?
Yo espero que no sea militar. Esta es una guerra asimétrica, que no es una confrontación entre ejércitos. Chávez fue exitoso porque utilizó redes sociales, ONGs y grupos criminales. La potencia militar venezolana no es grande y si pelea guerra convencional con Colombia, por ejemplo, pierde, pero su respaldo del exterior es fuerte. Aquí no se requiere solo una línea dura militar ni una suave diplomática, sino una línea inteligente.
¿Ves una solución al conflicto?
Me cuesta. Espero que sí, pero no será fácil. Pasa por construir un vecindario de países democráticos que aíslen a Maduro y le alejen de sus aliados. El Salvador tiene elección la próxima semana y el próximo gobierno tiene que elegir si seguir en el camino actual o se acerca a la democracia y los derechos humanos.
Etiquetas: Hezbollah, narcotrafico, Tareck Zaidan El Aissami Maddah, terrorismo
Tomado de “Veo escenarios donde cae Nicolás Maduro y no cambia nada en Venezuela”