VenePirámides
El candidato-comandante-paciente-presidente prometió 6 años de lo mismo: crímen, corrupción, inflación, desabatecimiento e incompetencia.
Por su parte, el economista José Guerra, quien forma parte del equipo que ha diseñado el plan de gobierno de Henrique Capriles afirma que si bien el objetivo es que Venezuela regrese a la inflación de un dígito, como ocurrió entre 1950-1978, no está planteado aplicar un ajuste drástico que disminuya la demanda porque el desequilibrio, afirma, está en la oferta.
«No creemos en un ajuste recesivo para combatir la inflación, el problema lo vemos en que hay poca oferta y principalmente consideramos que hay que establecer políticas macroeconómicas, estimular la producción nacional, recuperar la credibilidad, fomentar la competencia y una regulación que no frene la producción».
En el área macroeconómica, el proyecto considera esencial «acabar con la imprenta del Banco Central», es decir, que el BCV no fabrique billetes para financiar el gasto del Gobierno porque la inyección de bolívares artificiales de forma sostenida impulsa los precios.
«No hay experiencia de un país, sin dolarización, que haya logrado tener baja inflación sin un banco central que no financie el déficit del Gobierno, que se convierta en una herramienta para disminuir la inflación y no para impulsarla», dice José Guerra.
Para estimular la producción nacional en áreas sensibles como alimentos donde en el segundo trimestre hubo una caída de 9%, la estrategia es alcanzar acuerdos con las empresas para garantizar insumos, solucionar problemas de acceso a las divisas, transporte, sin levantar el control de precios de manera abrupta.
«Los controles de precios son tentadores, el problema es que generan escasez, el producto no existe, entonces tienes que importar masivamente y destruyes la producción nacional, pero no podemos levantar el control de precios de una sola vez, la experiencia de 1989 es aleccionadora en este sentido».
Inmediatamente agrega que no está planteada una economía sin regulaciones, pero estableciendo controles que no frenen la posibilidad de que surjan nuevas empresas.
«Cuando tienes controles muy rígidos solo sobreviven las empresas que soportan las regulaciones, las más grandes, tenemos que romper esto y estimular oferta nueva».
Otro elemento a tomar en cuenta es lograr la estabilidad. «Desde 1983 la política económica se ha tornado errática, devaluaciones, distintos regímenes cambiarios, esto ha traído poca inversión e incertidumbre, por eso hay que lograr estabilidad para que fluya la inversión en el país», explica José Guerra.
La necesidad de salir de un esquema donde el país tiene una moneda sobrevaluada que abarata las importaciones y no permite diversificar las exportaciones es otro elemento de importancia.
«Hay bienes no transables, no se puede pensar en acabar con la inflación importando barato, además estás expuesto a que la volatilidad del ingreso petrolero te obligue a disminuir las importaciones, ese es un esquema de perdedores», asegura.
Ante la interrogante de cuándo se podría alcanzar la inflación de un dígito indica que «como ya he dicho, no creemos en un ajuste recesivo, entonces es una meta que debería lograrse durante los próximos cinco o seis años», según reportó el diario El Universal.
Tomado de VenePirámides: Chávez: más de lo mismo; Capriles: cambio sin ajuste recesivo