Ali Espina, Secretario de Organización del partido político Unidad Visión Venezuela en la entidad zuliana, denunció que el oeste de Maracaibo lleva más de 20 días sin el servicio de agua, por presunta falta de un componente para su salubridad, lo que puede generar posibles enfermedades en quienes se vean en la necesidad de utilizar el “vital líquido” que manda la gobernación a través de cisternas.
“Los embalses de Manuelote y Tule están a punto de desbordarse, pero la Hidrológica del Zulia le importa un pepino el sufrimiento del ciudadano, el ministerio y los gobernantes de la región, tienen monopolizado la distribución del agua en Maracaibo”, aseveró Espina.
Asimismo reprochó la aptitud tomada por el ente encargado, donde su alegato fue que no tienen el químico que ayuda a purificar el agua. “Aunque parezca insólito, somos el único estado del mundo donde el agua tiene color marrón, olor putrefacto y sabor a barro. Quien se atreva a usarla corre el riesgo de padecer enfermedades”.
También lamentó “la mala gestión de los gobernantes del estado Zulia”. “Aquí en la región zuliana una cisterna de agua está cobrando 2 dólares por pipa, y 30 dólares por cisterna completa y muchas de ellas es agua salada, siendo la mayoría de estas del Ejecutivo Regional y permisadas por la Gobernación Bolivariana del Zulia”.
En ese sentido exhortó a las autoridades a tomar cartas en el asunto, considerando que muchos zulianos no tienen dinero para alimentarse, mucho menos para estar pagando un servicio tan importante como el agua, y que este no sea el de las mejores condiciones.
“Esta semana llegó el agua en varios puntos del oeste de Maracaibo y pudimos verificar que los habitantes no cuentan con agua de manera regular para poder hacerle de comer a sus hijos y mucho menos para el consumo diario, pedimos al gobernador del estado Zulia y al presidente de Hidrolago que tomen cartas en el asunto, ya que mientras no encuentren el químico para su tratamiento, les hagan llegar de manera gratuita el vital líquido a través de los llenaderos de Santa María, Los Plataneros y Planta C, y que no la sigan comercializándola como lo han venido haciendo”.
Finamente el dirigente zuliano, consideró que el agua que les está llegando no es apta para el uso de aseo personal y mucho menos para cocinar o consumirla. “Esta situación puede generar un desenlace peor en materia de salubridad, en un estado que ha sido tan olvidado y abandonado en esta materia por las autoridades competentes”.