El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha anunciado este lunes la convocatoria de elecciones a la Asamblea Nacional, ahora bajo control de la oposición. Es la tercera vez que lo anuncia, tras haberlo hecho en enero y febrero previamente, por lo que la validez de la sentencia es relativa. Por el momento la oposición no ha descartado participar en esta votación como ha hecho en anteriores ocasiones.
«Vamos a hacer elecciones, vamos a elecciones adelantadas de la Asamblea Nacional», ha afirmado Maduro durante un acto en el Palacio de Miraflores de Caracas convocado para conmemorar el primer aniversario de su victoria en las elecciones presidenciales del 20 de mayo de 2018.
Así, Maduro ha emplazado a la oposición a medirse electoralmente con el oficialismo antes de diciembre de 2020, cuando expira el actual mandato de la Asamblea Nacional.
«Vamos a medirnos electoralmente. Vamos a hacer elecciones. Vamos a legitimar la única institución que no se ha legitimado en los últimos cinco años. Vamos a elecciones anticipadas de la Asamblea Nacional para ver quien tiene al pueblo, para ver quién tiene los votos, para ver quién gana», ha planteado Maduro. Esta sería, según Maduro, la «solución pacífica y democrática» a la actual situación en Venezuela.
La Asamblea Nacional se renovó en las elecciones legislativas de 2015, que fueron reconocidas como válidas por Gobierno y oposición y dieron la mayoría parlamentaria a esta última.
En su intervención, Maduro ha aprovechado además para valorar la primera jornada de diálogo con la oposición celebrada en Noruega. «La primera jornada con la mediación del Gobierno de Noruega ha sido muy positiva. Soy un hombre que cree en la palabra como vehículo para superar las diferencias», ha apuntado.
«Ahora, no vayan a creer que soy un bobalicón, un inocentón. Creo en la paz, creo en el diálogo, pero estoy preparando al pueblo para defender la patria donde sea, cuando sea y como sea», ha advertido.
En cualquier caso, y pese a la propuesta de elecciones para la Asamblea Nacional, Maduro ha defendido la legitimidad de la Asamblea Nacional Constituyente, controlada por el oficialismo, y ha destacado que es la garante de la estabilidad del país.
Respuesta de Guaidó
Poco después de la intervención de Maduro, Guaidó ha reprochado su actitud al mandatario a través de la cuenta verificada de la «presidencia encargada» de Venezuela: «¿De verdad el usurpador se atreve a ponerse en la boca la palabra ‘elecciones’, después de que su dictadura y el CNE decidieran quitarle al pueblo de Amazonas el derecho a ser representado hasta el sol de hoy?», se ha preguntado.
«¡Cese de la usurpación en Miraflores y en el CNE!», ha apostillado Guaidó en referencia al Palacio Presidencial de Miraflores y al Consejo Nacional Electoral, encargado de la organización de las elecciones según la Constitución venezolana. En cualquier caso, por el momento Guaidó no ha rechazado concurrir explícitamente a los comicios.
La crisis política en Venezuela se agravó el 10 de enero, cuando Maduro decidió iniciar un segundo mandato de seis años que no reconocen ni la oposición ni buena parte de la comunidad internacional porque consideran que las elecciones presidenciales del 20 de mayo de 2018 fueron un fraude.
En respuesta, el presidente de turno de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, se autoproclamó mandatario interino el 23 de enero con el objetivo de cesar la «usurpación», crear un gobierno de transición y celebrar «elecciones libres».
Tomado de Maduro pide elecciones anticipadas a la Asamblea Nacional venezolana