VenePirámides
Dentro de los planes del Ministerio de Planificación y Finanzas está que la Bolsa Pública de Valores -una vez regularizado su funcionamiento- sustituya al Sistema de Transacciones con Títulos en Moneda Extranjera (Sitme), a fin de centralizar las operaciones de entrega de divisas desde ese despacho.
La decisión le restará facultades al Banco Central de Venezuela, como la del diseño e implementación de la política cambiaria que deber regir la economía, y le quitará de manera definitiva a la banca este lucrativo negocio, para entregarlo a los operadores que pagarán peaje al Superintendente Nacional de Valores, Tomás Sánchez.
El nuevo corro tendría tres objetivos. El primero: la venta de títulos de la República, de Pdvsa y de empresas públicas y privadas; el segundo: la subasta en el mercado internacional de títulos con la finalidad de liquidar divisas que permitan la importación de bienes y servicios; y el tercero: sacar del negocio a la banca y controlar el lucrativo negocio para beneficio de Tomás Sánchez y su banda de forajidos, ahora operadores de la Bolsa Pública Bicentenaria.
Hasta la fecha, en el Sitme no se permiten operaciones directas de empresas como Pdvsa, que desean colocar bonos a la venta. Funciona un mercado secundario de papeles que estaban en poder de un tercero, los bancos, y son asignados a través del sistema financiero a empresas importadoras interesadas en comprar dólares a un precio promedio de 5,30 bolívares por dólar, según reportó el diario El Nacional.
El mercado de valores socialista busca sustituir al desaparecido mercado de capitales y estará bajo supervisión directa del Ministerio de Planificación y Finanzas, que tiene la potestad legal de fijar el tipo de cambio en el que se realicen las transacciones en la Bolsa Pública.
La Superintendencia Nacional de Valores es el ente encargado de impulsar estos cambios, aunque no ha emitido información oficial sobre el destino de las casas de bolsa y sociedades de corretaje que no fueron intervenidas o no se les demostró ningún ilícito cambiario. Extraoficialmente se conoció que la intención de ese despacho es sacar de circulación a todas estas empresas, para dejar el monopolio del mercado paralelo a través de la Bolsa Pública a los nuevos «Operadores Autorizados», que carecen de experiencia alguna en esta materia, aún cuando tienen prontuario criminal, pagan vacuna y responden a las ordenes directas del Súper.
La Bolsa Pública funcionará en las instalaciones de la desaparecida U21 Casa de Bolsa y en ella realizarán transacciones los corredores autorizados, cuya formación y titulación estuvo bajo la responsabilidad de la Unefa y la Escuela de Hacienda Pública.
Tomado de liquidará el SITME para entregar el paralelo a sus operadores de la Bolsa Pública