Fuente: Itonadol/AJN
Luego de que la administración Trump se retirara del acuerdo nuclear con Irán, Washington aumentó las sanciones contra Hezbollah como parte de su ofensiva contra Teherán y sus representantes.
Pero la política de Estados Unidos contra el grupo terrorista libanés sigue siendo incoherente. Se opone a Hezbollah mientras apoya a las instituciones del estado libanés que controla, anulando su búsqueda de fuentes de financiación ilícitas.
Esta contradicción se está desarrollando en Paraguay, la Embajada del Líbano está intentando bloquear la extradición del financista de Hezbollah, Nader Mohamad Farhat.
El armamento y los combatientes de Hezbollah se concentran en Líbano y Siria, pero América Latina es un lugar de operaciones indispensable para las redes criminales que generan gran parte de los ingresos de Hezbollah.
Paraguay alberga una creciente operación de lavado de dinero conectada con Hezbollah en la Triple Frontera, donde Paraguay se cruza con Argentina y Brasil.
Cada vez más, los agentes locales de Hezbollah están involucrados en el auge local del tráfico de cocaína, hay evidencia de que Hezbollah envió altos funcionarios a la Triple Frontera para coordinar estas actividades.
El 17 de mayo las autoridades paraguayas allanaron una casa de cambio en Ciudad del Este y arrestaron a Farhat por su papel en el esquema de lavado de dinero de drogas por 1.3 millones de dólares.
Farhat es un miembro del Componente de Asuntos Comerciales, la rama de la Organización de Seguridad Externa de Hezbollah a cargo de dirigir operaciones de tráfico ilícito y finanzas ilícitas en el extranjero.
Las autoridades de norteamericanas quieren extraditar a Farhat, demostrando que el lavado de dinero afectó el sistema financiero estadounidense. El gobierno libanés quiere evitar que eso suceda.
Washington no debe permitir el curso de acción incorrecto sobre el narcotráfico, tampoco Paraguay.
Los Estados Unidos deberían dar garantías a Paraguay de que castigaran y extraditaran a los culpables de corrupción y narcotráfico.
El plan de lavado de dinero de Farhat es la punta del iceberg criminal de Hezbollah en la Triple Frontera. Los investigadores que allanaron el negocio de Farhat encontraron cheques en blanco valuados por millones de dólares.
Etiquetas: Hezbollah, lavado de dinero, narcotráfico, Triple Frontera
Tomado de Líbano protege el comercio de cocaína de Hezbollah en América Latina