10 / NOV / 2009 — 08:40 AM | El Departamento Antidroga de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) congeló hasta nuevo aviso los fondos de unos 1.000 clientes en el Caracas International Banking, ubicado en Puerto Rico. Entre los afectados hay víctimas del caso Stanford y cuentas con “cero dólares”.
Así lo cuenta un reportaje de Andrea Daza Tapia publicado en El Mundo Economía & Negocios:
“Sí, yo tengo una cuentica en el BNC en Puerto Rico”, admite por teléfono uno de los 49 clientes, entre operadores cambiarios y personas naturales, cuyos fondos en el Caracas International Banking Corporation, de San José, congeló el Departamento Antidroga de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés).
“Yo he movido normalmente mi dinero”, dice este ejecutivo, quien pidió la reserva de su identidad. “Es una cuentica muy chiquita, nada del otro mundo. Incluso hay una tarjeta americana que yo pago con eso”.Horas más tarde, cuando quiso entrar a su cuenta, se encontró con el aviso infame: “Denegado”.
La noticia le cayó como un tobo de agua fría. Llamó al banco pero no tuvo más información que la reseñada por la prensa: “Imagínate, y yo soy una víctima del Stanford Bank”. En la sede de ese banco en Antigua, depositó la liquidación de su último trabajo como alto gerente. Sus ahorros siguen congelados por la Comisión de Valores de Estados Unidos.
Las trabas del negocio Un directivo de una de las empresas afectadas por la medida de la DEA explica que ellos tienen cuentas “en casi todos los bancos de primera línea de Estados Unidos”. Para él se trata de una situación que va más allá: “A nivel mundial las casas de cambio experimentan un problema grave”.
No le abren cuentas en el norte
“En este caso, la Superintendencia de Bancos me tiene permisado, en un país soberano, que sigue los acuerdos internacionales”. De modo que para él, actuaciones como ésta son un “contrasentido”. Y sin embargo, por reacciones de la Superitendencia prefirió no decir su nombre.
El directivo lamentó el hecho y añadió que cada vez que ocurre algo como esto, lo primero que hacen es revisar las cuentas de operadores como él: “Las casas de cambio no son bien vistas en el sistema financiero, somos el patito feo”. Este afecto confía en el recurso de amparo que introdujo el Caracas Internacional Banking, para que la corte distrital de Puerto Rico declare nula la medida.
En opinión de una sociedad de corretaje, que tampoco quiso revelar su nombre, la acción de la DEA fue simple: “Agarraron a un grupo completo e hicieron un barrido de venezolanos”. El viernes pasado recibieron la orden de congelación de una cuenta que tenían cerrada: “Con cero dólares. Estamos tratando de entender lo que pasó”.
Ninguno de los dos tuvo cuentas con Rosemont, la empresa de Rama Vyasulu a quien la DEA intervino en marzo, paralizando el mercado alternativo de divisas. “Si ese caso empezó en el Bank of America”, se pregunta uno de los directivos, “¿cómo es posible que estén investigando en Puerto Rico?”.