La creación de la banca popular, alternativa y endógena, con capacidad de recibir depósitos para que pueda –amparada en el artículo 299 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela– otorgar créditos a la ciudadanía, es una de las propuestas contemplada en la reforma a la Ley General de Bancos y Otras Instituciones Financieras. Jesús Caldera Infante, presidente de Fogade, dice que con esta modificación se permitirá que “hombres y mujeres que siempre han estado excluidos tengan acceso al crédito y que se democratice la posibilidad de entrar al sistema bancario nacional”.
“Es menester en Venezuela abrir cause para que las personas que se han preparado en escuelas y universidades, que tengan capital, puedan juntarse en cooperativas o en asociaciones de propiedad colectiva, como banca popular y así poder constituir una gran red de instituciones de este tipo que generen una opción distinta a la banca tradicional, la cual se ha caracterizado por los altos índices de desbancarización, que se traduce en exclusión e injusticia económica y social…”
Consultado acerca de la posibilidad de crear instituciones microfinancieras en los sectores populares del país, Caldera Infante dijo que: “nosotros creemos que es posible alcanzar un régimen socieconómico donde al mismo tiempo, haya crecimiento y desarrollo humano integral sustentable, calidad de vida, justicia social, empleo, sin desigualdades ni discriminación”.
En tal sentido destacó que en Fogade “estamos capacitando a hombres y mujeres de la economía popular y ya hemos logrado que la banca privada se incorpore a esta iniciativa otorgando créditos a estos nuevos emprendedores, sin tantos requisitos y en el menor tiempo posible. Así ponemos en práctica un modelo al que hemos denominado Finanzas Sociales, que es simplemente la puesta en práctica de las finanzas al servicio del desarrollo social y económico integral sostenible y sustentable del pueblo venezolano”.