VenePirámides
Las estadísticas del Banco Central de Venezuela indican que en septiembre el precio de los alimentos, la variable que más incide en la calidad de vida de los sectores de menos ingresos, registra un incremento de 2%, que representa el mayor salto de los últimos ocho meses.
Principalmente los consumidores han comenzado a pagar más por los productos agrícolas, que experimentan el incremento más pronunciado de los últimos 14 meses tras un avance de 4,5% en septiembre.
Estos resultados presagian el fin de un período en el que los alimentos y bebidas no alcohólicas, la variable que más pesa en la medición de la inflación, experimentaron aumentos de precios inferiores a los de 2011.
Efectivamente, al observar el comportamiento en los primeros nueve meses de este año los alimentos y bebidas no alcohólicas acumulan un alza de 10,5% versus 24,6% en el mismo lapso de 2011.
¿Qué permitió este resultado? Si bien el Banco Central ha explicado que obedece a mejoras en la oferta, sus propias cifras indican que la producción de la industria de alimentos cayó 9,4% en el primer semestre y el PIB agrícola experimentó un mínimo avance.
En realidad, todo indica que la desaceleración que tuvo la inflación de alimentos en los primeros ocho meses del año obedece a importaciones masivas para compensar las fallas de oferta y la decisión de postergar los ajustes en los precios regulados.
En el primer semestre la asignación de dólares al tipo de cambio oficial para importar alimentos aumentó 50% y ha sido evidente que el Gobierno, a pesar de las quejas de empresarios, no permitió alzas en los alimentos controlados durante la campaña electoral.
Asdrúbal Oliveros, director de Ecoanalítica, considera que el rebote que ha tenido la inflación de alimentos en septiembre tiene su origen en que el Gobierno disparó el gasto público durante el último mes de la campaña electoral y más bolívares detrás de la misma cantidad de productos se traduce en incrementos de precios.
«La liquidez aumentó a gran velocidad por el impulso del gasto público y la FAO reconoce que el precio de los alimentos en el exterior se ha elevado y esto impacta al país por el peso que tienen las importaciones en la oferta», dice Oliveros.
Profundiza en el tema y señala que «también pesan factores estacionales y que últimamente ha habido retrasos en la entrega de dólares a los importadores de alimentos».
En septiembre la inflación como un todo registra un salto de 1,6%, el avance más pronunciado de los últimos cuatro meses y muy superior al 1,1% registrado en agosto.
No obstante, gracias a que los precios se movieron a un ritmo muy inferior al del año pasado durante los primeros meses del año, la inflación acumula un incremento de 11,5% al cierre de septiembre versus 20,5% en el mismo período de 2011 y en los últimos doce meses la variación es de 18% versus 26,5%.
El Banco Central considera que estas cifras son positivas porque señalan que es posible cumplir la meta de que la inflación se ubique por debajo de 22% este año.
Sin embargo, aún teniendo éxito en esta empresa, Venezuela seguirá sufriendo una inflación que triplica al promedio de América Latina.
En el mediano plazo la posibilidad de que la inflación continúe fluctuando en las tasas que ha experimentado en 2012 luce comprometida.
Durante dos años el Gobierno ha mantenido el tipo de cambio oficial en 4,30 bolívares por dólar pero el desequilibrio en las finanzas públicas donde los gastos superan en 12% del PIB a los ingresos, lleva a analistas a pronosticar que en el primer trimestre de 2013 habrá una devaluación.
De esta manera el Gobierno obtendría más bolívares por los petrodólares a fin de cubrir el alza del gasto público pero también aumentaría el costo de los productos importados.
Al riesgo de devaluación se añade que a fin de evitar que la escasez que, sigue siendo alta y cierra en 13,6% en septiembre, alcance niveles preocupantes será inevitable permitir incrementos de precios en los alimentos y medicinas reguladas, según reportó el diario El Universal.
Tomado de Inflación en alimentos se acelera a su punto más alto en 8 meses