VenePirámides
El informe que el Banco Central de Venezuela le entregó al Gobierno al cierre de agosto desnuda que la sequía de divisas que sufre el sector privado y el rezago en el ajuste de los precios controlados se traduce en un salto muy importante de la escasez de alimentos básicos y productos de cuidado personal en Caracas.
El termómetro general, que refleja un promedio de todos los alimentos que chequea cada mes el Banco Central arroja una escasez de 19,2% que prácticamente duplica el 10% registrado en agosto de 2012 y en 16 alimentos alcanza la categoría de «serios problemas de desabastecimiento» porque se ubica por encima de 41%.
Por ejemplo, la leche completa líquida no se encuentra en 81,5 de cada 100 comercios visitados por el Banco Central, el aceite de maíz en 86,6 y la margarina en 64,7.
Al mismo tiempo el desabastecimiento aumenta en los 19 de rubros de cuidado personal a los que la Superintendencia Nacional de Costos (Sundecop) les rebajó el precio en abril de 2012. En 70,8 de cada 100 establecimientos no hay papel higiénico, en 41,9 ceras para pisos, en 28,1 faltan las compotas y en 18,7 el jabón de baño.
Las empresas que producen alimentos y bienes de cuidado personal dependen de que Cadivi apruebe las divisas que permiten importar materias primas para producir y luego que el Banco Central desembolse los dólares y, no hay suficientes.
En un entorno donde el Gobierno mantiene convenios con países a los que vende petróleo a descuento, la cantidad de barriles que extrae Pdvsa declina y la suma a cancelar por deuda externa aumenta, las reservas de dólares en efectivo que tiene el Banco Central no superan dos mil millones de dólares, una cantidad que obliga a desembolsar a cuentagotas y se traduce en que las empresas no pueden importar todo lo que necesitan o caen en mora con sus proveedores en el exterior.
El reporte quincenal que elabora la división de alimentos de Polar, empresa líder en la producción de alimentos básicos en el país, precisa que al cierre del 11 de agosto de este año la compañía debe a sus proveedores en el extranjero 167 millones de dólares.
El reporte también muestra las dificultades para la obtención de la materia prima. Aunque la empresa «está operando a máxima capacidad» en el caso de la harina precocida de maíz, Alimentos Polar subraya que «actualmente estamos produciendo con la materia prima de la competencia que fue transferida por orden del Gobierno nacional».
Otra traba importante para las empresas es que antes de acudir a Cadivi necesitan que el Ministerio de Industrias les entregue el Certificado de No Producción de lo que desean importar y en este momento el trámite está tardando alrededor de cuatro meses.
A fin de impedir que la inflación se muestre por completo el Gobierno controla el precio de una amplia gama de productos y la experiencia demuestra que cuando las empresas no pueden cubrir sus costos u obtener una ganancia adecuada cae la producción y aumenta la escasez.
Si bien las autoridades han permitido incrementos en alimentos básicos este año y en los primeros ocho meses los bienes regulados acumulan un alza de 26% los precios permanecieron represados por largo tiempo y aún las empresas no logran cubrir sus costos adecuadamente.
En julio los ministros de Alimentación, Agricultura y Tierras, Comercio y Finanzas entregaron al Presidente Nicolás Maduro un cronograma para superar el desajuste con aumentos en el precio de alimentos básicos en septiembre, noviembre y febrero, según reportó el diario El Universal.
Tomado de ineptitud en manejo de divisas potencia la escasez