El exfutbolista Ronaldo Nazário adquirió recientemente el Cruzeiro Esporte Clube, equipo donde comenzó su carrera en el fútbol brasileño. El equipo tiene su sede en Belo Horizonte, capital de Minas Gerais.
Ronaldo había comprado en 2018 el Real Valladolid, equipo de la Liga Española de Fútbol, dando pie a rumores sobre la participación en el acuerdo, de un connotado empresario del ámbito financiero venezolano.
La nueva compra del futbolista brasileño deja dudas sobre de dónde provienen los fondos y si el mismo empresario guarda también relación con esa nueva operación, que algunos ven con una posible “lavadora” de recursos relacionado con Venezuela, pues el exfutbolista no ha heredado ninguna fortuna y su época de gloria en el fútbol hace tiempo que pasó.
La compra
El célebre exfutbolista brasileño Ronaldo Luís Nazário de Lima anunció el sábado 18 de diciembre la adquisición de Cruzeiro, club profesional de fútbol, donde empezó su carrera deportiva en 1993, recogió O Globo.
«Muy feliz de haber completado esta operación. Quiero decir que tengo mucho que devolverle al Cruzeiro, llevar al Cruzeiro adonde se merece estar. Tenemos mucho trabajo por delante. Pido a la afición que reconecte con el equipo, que vayan al estadio, porque vamos a necesitar mucha fuerza y unidad», dijo la estrella del fútbol mundial, reseñó RT.
«Este traspaso contempla el reequilibrio financiero y operativo […] del club, con un plan de crecimiento sostenible a medio y largo plazo», reza el comunicado del combinado.
Ronaldo compró el 90 % de las acciones de Cruzeiro por un valor de 70,2 millones de dólares. La inversión se efectuó a través de la empresa Tara Sports. El delantero brasileño y dos veces ganador de la Copa del Mundo también es dueño del Valladolid, club de Segunda División de España. En 2018 adquirió el 51 % de la participación por más de 33 millones de dólares.
¿Cuál será el destino del Real Valladolid?
Desde 2020 Ronaldo ha negado rumores sobre la posible venta del Real Valladolid. Los mismos rumores han reaparecido ahora que el futbolista adquirió el Cruzeiro Esporte Clube. Ese año Ronaldo aseguró que “no” tenía intención de vender el club y que las informaciones que habían surgido al respecto eran falsas -”fake news”-, propagadas por “una oposición fantasma”.
“De momento, no hay nada ni tengo la intención de vender el club, porque aunque llegan cosas, no ha habido una oferta real”, resumió Ronaldo en una rueda de prensa, convencido de que “los rumores solo sirven para confundir el ambiente y a la afición”, porque “hay personas a las que no les gusta que el club esté creciendo”.
“Llevo más de dos años al frente del club, y lo que quiero es dejar un legado importante en esta ciudad y en el Real Valladolid, y no está concluido. De hecho, dije que estaría en el club cinco años de inicio, pero puesto que hay muchas cosas que quiero hacer y se van a retrasar, estaré aquí, mínimo, otros cuatro años más”, desveló, reseñó sport.es.
Asimismo, Ronaldo afirmó desconocer que un inversor venezolano, estuviera entre los accionistas de la entidad con cinco millones de dólares: “Es un amigo muy cercano y no me consta que esté, de momento, entre los accionistas del club. No sé de qué se trata. Tendré que ver exactamente lo que es”.
En cuanto a la sociedad Tara Sport, empresa de la que es el único accionista y que está presente en el accionariado del club y con la que pidió un préstamo de 9 millones de euros, sostuvo que se trataba de un asunto relacionado con sus “inversiones personales”.
“Si como dices, las cuentas son públicas, pon lo que desees. Paso de tus preguntas”, respondió al ser preguntado sobre esa cuestión, tras asegurar previamente que “no” pidió ningún préstamo cuando compró el Real Valladolid, sino que lo pagó “con su patrimonio” porque fue una apuesta “cien por cien” suya.
En 1994, Cruzeiro vendió a Ronaldo al PSV Eindhoven de los Países Bajos por 6 millones de dólares (34 millones de reales al precio de hoy). Han pasado 27 años y ahora Ronaldo compró el Cruzeiro por 400 millones de reales.
La noticia que estalló el sábado (19/12), cobró gran repercusión internacional. Y, pocas horas después del anuncio, José Berenguer, el CEO de XP Investimentos que negoció la negociación del club de Minas Gerais, dio a conocer esta otra información en su perfil de LinkedIn:
“No tengo ninguna duda de que hoy empezamos a transformar la historia del fútbol nacional. El crucero es solo el primero. Están por venir muchas otras negociaciones similares que involucren a clubes brasileños. Botafogo será el siguiente, también asesorado por nuestra Banca de Inversión”.
“Hace unas semanas, ya habíamos anunciado aquí en la columna que XP buscó al presidente del Corinthians , Duílio Monteiro, para hablar sobre la posibilidad de que el club se convierta en una sociedad anónima”, señaló Marcondes Brito en metropoles.com.
Esta nueva normativa que favorece la transformación de los clubes de fútbol en empresas es muy prometedora. La ley, promulgada en agosto, instituye la Sociedad Anónima de Fútbol (SAF) para fomentar actividades relacionadas con el deporte, como el entrenamiento de deportistas y la explotación de derechos de marca, propiedad intelectual y transferencias de jugadores.
La inversión de Ronaldo en el Cruzeiro es pequeña, si nos comparamos, por ejemplo, con los valores que el Flamengo se embolsó con la venta de dos jóvenes deportistas, como Vinicius Jr (R $ 288 millones) y Lucas Paqueta (R $ 224 millones).
Los 400 millones de reales de Ronaldo equivalen a aproximadamente 155 millones de euros. Es decir, es mucho menos que el «pix» de 222 millones de euros que gastó el PSG para sacar a Neymar del Barcelona.
De todos modos, estamos hablando de una aventura valiente, en un negocio que no siempre da la rentabilidad deseada. La compra del 90% de las acciones de Cruzeiro será la tercera gran empresa de Ronaldo como sombrero de copa. Hoy es socio mayoritario del Real Valladolid, de España, equipo que fue relegado bajo su dirección a Segunda División.
Antes, fue miembro del Fort Lauderdale Strikers, un club de Florida que jugaba en la North American Soccer League (NASL), una liga alternativa a la MLS. No fue una experiencia exitosa, es bueno ser claro.
Pero es preferible mirar el ejemplo del Chelsea, comprado en 2003 por el oligarca ruso Roman Abramovich por 140 millones de euros. Durante este período, el equipo inglés ganó dos Champions League.