Empresarios cercanos al Gobierno de Venezuela y ex empleados públicos venezolanos fueron acusados el miércoles en una corte federal de Miami de formar parte de una gigantesca red de corrupción que lavó cerca de $1,200 millones obtenidos fraudulentamente a través del régimen cambiario del país. Los empresarios, algunos de los cuales son identificados en la acusación como “bolichicos” (empresarios que se han enriquecido gracias al chavismo), son acusados de aprovecharse del gigantesco diferencial entre la tasa de cambio oficial y la del mercado negro para amasar ganancias estimadas en varios cientos de millones de dólares. Al centro de la acusación se encuentra el venezolano Francisco Convit Guruceaga, uno de los principales accionistas de la polémica firma Derwick Associates, cuestionada por obtener contratos poco transparentes en el sector de energía venezolano.
En la acusación, presentada ante la Corte Federal de Miami, las autoridades advirtieron que operaciones como la que manejaban los acusados están inundando el sur de Florida con dinero mal habido proveniente de Venezuela.
“La malversación de las disminuyentes reservas internacionales es el combustible en estos esquemas de corrupción con el tipo de cambio. PDVSA es la principal fuente de ingresos y las monedas extranjeras (principalmente el dólar estadounidense y los euros), están siendo usadas para alimentar este tipo de operaciones corruptas”, dijo la acusación presentada ante la corte.