Estados Unidos mide fuerzas con el régimen de Nicolás Maduro a través de acciones determinantes que sirvan como advertencia a la dictadura de que el tiempo de las amenazas y la inacción quedó atrás con el fin del mandato de Joe Biden. Presionar a la dictadura para propiciar el cambio político es el objetivo confeso del gobierno estadounidense.
Pero no solo eso, sería el anticipo ante la ya evidente toma de control de la industria petrolera venezolana por parte de China.
En este contexto se inscriben las recientes afirmaciones del secretario de Energía de EE. UU., Christopher Wright, quien insistió en la aplicación de presión sobre el régimen venezolano para, de esta manera impulsar el cambio político en el país. Refirió que el gobierno de Donald Trump procura “encontrar la manera de que Venezuela vuelva a ser una nación civilizada, una que no amenace a sus vecinos, que no empobrezca a la gente ni envíe bandas criminales a Estados Unidos”.
“Venezuela era una sociedad próspera y rica, un gran aliado de Estados Unidos y un enorme productor de energía. Luego adoptaron, ya sabes, a Hugo Chávez y ahora a Nicolás Maduro, dos líderes tiránicos terribles”. Por ello, esta segunda administración de Trump se valdrá de la fuerza de Estados Unidos o la independencia energética para forzar un cambio en Venezuela.
Es muy posible que las demostraciones de fuerza por parte de Estados Unidos continúen próximamente, sobre todo porque la administración Trump sabe perfectamente que China está al acecho y gana terreno al asumir el control de PDVSA poco a poco.
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Sobrevivir a cualquier precio
Estados Unidos quiere ejercer la mayor presión sobre el régimen de Maduro y asfixiarlo financieramente.
Entretanto EE. UU. se mueve de la manera descrita, Nicolás Maduro hace lo propio y pacta —o intenta pactar— con sus socios del “eje del mal”, como lo bautizara el expresidente George Bush—China, Rusia, Irán, Corea del Norte— aunque con ello enajene la república y someta el interés nacional a su interés de supervivencia a como dé lugar. Es decir,como apuntamos, Estados Unidos mide fuerzas con el régimen de Nicolás Maduro.
El chavismo es capaz de pagar cualquier precio con tal de mantenerse en el poder, aun a costa de la soberanía nacional, o peor, de la destrucción de Occidente.
No las tiene fácil el régimen, pues las propias circunstancias de estos aliados de la dictadura en el oriente del mundo, les impide lanzar el tan ansiado salvavidas que Maduro reclama. Al parecer, solo China ha prestado auxilio y ha comenzado a tomar control de la industria petrolera venezolana, tal es el caso de la refinería de Cardón.
Maduro entrega la soberanía a China
Iván Freites, secretario de profesionales y técnicos de la Federación Unida de Trabajadores Petroleros (FUTPV) y secretario general del Sindicato Único de Trabajadores Petroleros Petroquímicos y Gasíferos del Estado Falcón (SUTPGEF), denunció en su cuenta de la red social X (@IvanRFreites), la entrega de las refinerías de Paraguaná, Amuay y Cardón a China.
Freites sostiene que los técnicos chinos iniciaron los trabajos de reparación en algunas plantas y unidades de la refinería Cardón. Explica que la empresa China Concord firmó un contrato con PDVSA que le permite la extracción de petróleo en el Lago de Maracaibo, al tiempo que asume el control sobre toda la infraestructura vinculada a la refinación de dicho petróleo. Es decir, los oleoductos, tanques de almacenamiento y terminales marítimos con acceso al Mar Caribe y a toda la costa venezolana.
Advierte que no se trata de una empresa mixta, sino de un contrato de producción compartida en el que se establece que la empresa china pone el capital para reparar la refinería, lo que le permite quedarse con la mitad de la producción petrolera y, además, descontar los gastos de capital de la parte de PDVSA. De este tipo se han suscrito ya 13 contratos y se espera la firma de otros más.
De acuerdo a Iván Freites, “Nicolás Maduro avanza en la destrucción de la soberanía mientras los opinadores de oficio, los autoproclamados ‘influencers’ siguen subestimando sus abusos” y subraya que los campos que se están entregando a las empresas chinas no son los que operaba Chevron.
Para el dirigente sindical se trata de un negocio que solamente beneficia a China —como también a Rusia e Irán si también se suscriben contratos de este tipo con ellos— mientras que para Venezuela representa una gran pérdida.
Y al igual que aseguran nuestras fuentes, Iván Freites asegura que la presencia china es un hecho consumado en las instalaciones petroleras del país: “a comienzos de mayo eran 30, ahora son 60, más adelante serán 200 hasta llegar a 5 000 y quizás más”.
Alerta que los técnicos chinos dejarán solamente a aquellos trabajadores de quienes puedan aprender la operación y a los contratistas venezolanos les pagarán hasta que no sean necesarios. Es decir, los trabajadores petroleros venezolanos entrenan a los chinos, para luego ser desplazados por estos.
Recuerda que en Venezuela los campamentos extranjeros de las áreas petroleras fueron eliminados hace más de 50 año, pero Nicolás Maduro los está reactivando. “Hemos retrocedido a los tiempos de ‘Casas Muertas’”.
En las siguientes tablas contienen los trece contratos firmados y las empresas chinas beneficiadas:
La toma china de PDVSA
De hecho, tenemos conocimiento de que personal de Petróleos de Venezuela S.A. —especialmente gerencia media— está siendo enviado a China desde hace algunas semanas. ¿Con qué objetivo? Pues el de ser instruidas acerca de cuáles serán las normativas para las operaciones del gigante asiático en las refinerías y áreas operacionales petroleras y gasíferas del país.
Se nos informa que, en las instalaciones de PDVSA en el Distrito San Tomé, ya varios de sus departamentos reciben lineamientos desde China a sus respectivos subordinados. Una circunstancia que se repite en Puerto La Cruz y en PDVSA Occidente.
No es novedad la presencia china en Venezuela, pero sus operaciones en el país y particularmente en PDVSA, no habían tenido la contundencia que se observa en la actualidad. Órdenes directas al personal de cierta jerarquía, a quienes corresponde servir de multiplicadores de las nuevas directrices a su personal subordinado. Se trata, pues, de la toma de las instalaciones de la industria que, por ahora, tiene lugar desde afuera, pero que se vislumbra directa e in situ muy próximamente.
Las licencias OFAC
El pasado 9 de mayo del presente 2025, expiró la Licencia General 80 por la cual era posible que algunas empresas petroleras estadounidenses operaran en Venezuela con ciertas restricciones. De esta manera, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos dejó sin efecto las actividades que permitía realizar a Halliburton, Schlumberger Limited, Baker Hughes Holdings LLC y Weatherford Internacional con Petróleos de Venezuela (PDVSA), así como con entidades relacionadas.
En específico, la Licencia 80 otorgaba un margen de maniobra al régimen de Nicolás Maduro en materia petrolera:
Garantizar la seguridad del personal y la integridad de operaciones y activos en Venezuela.
Participar en reuniones de accionistas y juntas directivas.
Realizar pagos de facturas de terceros.
El presidente de EE. UU., Donald Trump, comunicó a los socios de PDVSA —Repsol, Eni, Reliance Industries y Maurel & Prom— la revocación de sus permisos y exenciones para comercializar crudo y sus derivados venezolanos. Se estableció plazo hasta el 27 de mayo de 2025 para la conclusión definitiva de las actividades de Chevron en Venezuela, tras las excepciones concedidas por la administración saliente de Joe Biden.
Esto último es fundamental, pues necesario dejar sentado que estas licencias fueron otorgadas por el gobierno demócrata.
Sin embargo, hay que decir, además, que muchas de estas empresas cesaron las importaciones de petróleo venezolano en razón de la instrumentación de un arancel de 25 % a quienes adquieran crudo y gas de Venezuela impulsado por Donald Trump. Por ejemplo, Repsol y Reliance con significativa presencia en Estados Unidos, solicitaron autorización para mantener sus operaciones en el país y así evitar sanciones.
El fin de la Licencia General 80 es parte de presión internacional que sobre el régimen de Maduro. Una política que, de acuerdo a los especialistas, podría intensificar la ya creciente crisis económica venezolana dependiente casi en su totalidad de la renta petrolera.
Descontinuación de operaciones de Chevron
Durante el mes de marzo, el presidente Trump anunció la revocatoria de las concesiones petroleras que permitían a Chevron Corp. operar en Venezuela por autorización de la administración de Joe Biden. La OFAC, entonces, emitió la Licencia General 41A con la que liquidó algunas transacciones con las empresas conjuntas de Chevron Corporation en Venezuela.
Se trata de una licencia que modifica la anterior Licencia General 41 que autorizaba ciertas operaciones necesarias para la producción, venta, exportación e importación a Estados Unidos de petróleo y productos derivados producidos por Chevron, sus subsidiarias o empresas conjuntas de dicha compañía en Venezuela.
En pocas palabras, la Licencia General 41A se traduce en la descontinuación de las transacciones previamente autorizadas por la Licencia General 41 el 3 de abril de 2025.
En fecha previa, específicamente el 26 de febrero de 2025, Trump informó su decisión de revocar la autorización de Biden otorgada a Chevron Corp. y sus subsidiarias. El objetivo de esta medida era promover elecciones libres y la reforma de los derechos humanos en Venezuela. En su red social Truth Social, el mandatario acusó el incumplimiento del régimen de Maduro respecto a las reformas electorales acordadas, así como la falta de diligencia del régimen en el retorno de migrantes, lo cual es una prioridad para esta nueva administración estadounidense.
La política de Donald Trump apunta al endurecimiento de las sanciones contra el régimen de Nicolás Maduro, a objeto de a cortar los flujos financieros de la dictadura y las empresas estatales, especialmente Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA).
Las medidas no solamente afectan a las empresas que operan en el sector energético venezolano, sino también a los bancos e instituciones financieras y organizaciones que los sirven y abastecen.
Se trata de una acción de gobierno destinada a cortar todo apoyo, grande o pequeño, al régimen de Nicolás Maduro. No hay respaldo insignificante, todo cuenta. En esto se inscriben empresas como Eising Energy Services Inc. y Reimpet Intrenational Corporation. Esta última, por ejemplo, presta un gran servicio al régimen de Maduro, pues le permite sostener las operaciones en Faja Petrolífera del Orinoco.
Esta nueva circunstancia de la dictadura de Maduro, impulsa el accionar que, muy seguramente mueve tras bastidores el régimen para que, ante la ausencia de Chevrón y las otras empresas de servicios en el país, China, PDVSA y las contratistas piratas, se alisten para operar los campos y refinerías abandonas por las primeras.
En su página web s Eising Energy Services Inc. se describe como una empresa global proveedora de servicios petroleros, especialmente perforación por contrato, perforación direccional, perforación bajo balance y con presión controlada, alquiler de equipos, mantenimiento de pozos y servicios de producción.
Se constituyó en 1987 y opera en Canadá y Estados Unidos hasta Latinoamérica, Oriente Medio y Australia.
Entretanto, en El Tigre, estado Anzoátegui, opera Ensign De Venezuela C.A., en la avenida España, Local Ensign, Sector Pueblo Nuevo, con el Registro de Información Fiscal (RIF) Rif J-08001581-9 (1).
Reimpet Intrenational Corporation
Reimpet International Corp es una empresa con sede Houston que compra y vende equipos para campos petrolíferos por más de una década. Trabajan con empresas de servicios de pozos y contratistas de perforación estadounidenses con gran volumen de operaciones y equipos del mercado norteamericano para clientes internacionales de América del Sur, África y Medio Oriente (2).
En Venezuela opera como Reimpet Holding Group C.A. ubicada en la Calle Las Industrias, Patio Nº 20, Zona Industrial de San J.d.G., Municipio Guanipa del Estado Anzoátegui. Está representada por Víctor García Cámara, Maricel Torres y Alejandra Pérez.
Lo irregular siempre presente
Ahora bien, significa esto que durante la vigencia de las licencias OFAC lo irregular no operó en la industria petrolera venezolana. De ninguna manera, pues la corrupción chavista ha sido elemento fundamental de supervivencia del régimen venezolano desde la llegada al poder en diciembre de 1998.
De hecho, fuentes de Venezuela Política advierten que, en la actualidad, dentro de PDVSA tienen lugar decenas de actividades oscuras, entre ellas operaciones ficticias para justificar pagos y regalos a los responsables de cada unidad contratante. Es decir, en la petrolera venezolana se suscriben contratos y se factura por trabajos que nunca se llevan a cabo pero que se traducen en el flujo de dinero entre funcionarios corruptos y empresas contratistas.
Aseguran nuestros informantes que sobres llenos de dólares se reparten dentro de casa unidad contratante con montos que varían de acuerdo al nivel jerárquico, desde USD 200 hasta miles de dólares, dependiendo de la monumentalidad de las obras inventadas, pero facturadas con reparto de beneficios entre los participantes.
La corrupción campea en PDVSA a todos los niveles, refieren nuestras fuentes, las cuales anuncian igualmente que, dentro de poco, terminará la capacidad de almacenamiento de crudo, lo que propiciará la parada de pozos y una obligada caída de la producción.
Habrá que estar al pendiente de las próximas acciones que tengan lugar de lado y lado, a objeto de poder tener un panorama más fiel del que será el futuro próximo, del régimen de Maduro y la industria petrolera venezolana. Mientras tanto Estados Unidos mide fuerzas con el régimen de Nicolás Maduro, la expectativa continúa.
Vea en Sin Filtros “Trump Activa Sanciones: Fin del Juego Petrolero en Venezuela”:
Fuentes consultadas:
1) Trade Atlas. Ensign De Venezuela C.A. Disponible en: https://www.tradeatlas.com/es/firms/ensign-de-venezuela-c-a/780577618f0cd5d4
2) Reimpet International Corp. Disponible en: https://reimpetintl.com/about-us