El vínculo entre Edmundo Kabchi y el Málaga CF, el equipo que cae en picada en el fútbol español: desde el fichaje de jugadores venezolanos hasta las sospechas de blanqueo

 

Por Cocky de la Torre

Edmundo Kabchi Zakia es un empresario venezolano-libanés que desde hace años participa en el negocio del fútbol en distintos países. Es el agente de varios jugadores sudamericanos, como Ronald Araújo, Mauro Arambarri y Gastón Álvarez, y el dueño del Club Atlético Boston River de Uruguay. Además, fue el presidente del Deportivo Táchira de Venezuela durante nueve años, hasta que lo vendió en 2016.

El Club Atlético Boston River es un club de fútbol uruguayo con sede en el complejo deportivo «Edmundo Kabchi», ubicado en el barrio Manga. El club fue fundado el 20 de febrero de 1939 en el barrio Simón Bolívar, de la ciudad de Montevideo.

La relación de Edmundo Kabchi Zakia con el fútbol español no se limita a sus representados o a su hermano Georges Kabchi, el actual propietario del Albacete Balompié. Edmundo Kabchi también fue uno de los prestamistas del jeque Abdullah Bin Nasser Al Thani cuando este era el dueño del Málaga CF. Su apoyo financiero coincidió con la llegada de varios futbolistas venezolanos al club andaluz, como Salomón Rondón, Roberto Rosales, Adalberto Peñaranda o Juan Pablo Añor.

La gestión del jeque Abdullah Bin Nasser Al Thani en el club de fútbol Málaga fue polémica debido a que él y sus hijos Nasser, Nayef y Rakan fueron apartados de la misma, por la jueza María Ángeles Ruiz González, después de analizar una querella interpuesta por la Asociación de Pequeños Accionistas (APA) y revisar la documentación presentada tanto por dicha entidad como por la Policía Nacional. En ella, la magistrada encontró indicios de “la presunta comisión de un delito de administración desleal y/o apropiación indebida y blanqueo de capitales”.

Además, Edmundo Kabchi tenía el 50% de los derechos económicos de Sergi Darder, un centrocampista catalán que fue traspasado al Olympique de Lyon en 2015 por 12 millones de euros. El Málaga CF solo recibió la mitad de esa cantidad, ya que había vendido previamente la otra mitad al fondo inversor liderado por Kabchi.

Edmundo Kabchi, empresario con un historial de negocios opacos en Venezuela, acentúa su presencia en el fútbol y en las inversiones inmobiliarias en España

Recientemente, ya en 2023, Edmundo Kabchi ha creado una sociedad en España llamada Ven-Invest Fútbol SL, con el objetivo de aumentar sus servicios relacionados con el fútbol, desde el scouting hasta la intermediación. La sociedad también contempla la posibilidad de realizar inversiones inmobiliarias en el país, aunque por el momento no se ha concretado ninguna.

Edmundo Kabchi es, pudiera decirse, un pez gordo del fútbol sudamericano que ha conseguido expandir sus negocios al fútbol europeo, a pesar de ser considerado por algunos, un personaje con sospechosas conexiones asociadas al chavismo. Su vínculo con el Málaga CF ha sido clave para su proyección internacional y para la presencia de jugadores venezolanos en la liga española.

Edmundo Kabchi es vicepresidente suplente del Banco Caroní, una entidad bancaria venezolana fundada por su padre, Edmundo Kabchi Murgus, junto a Arístides Maza Tirado. El Banco Caroní forma parte del Grupo Caroní, dedicado, entre otros, al sector asegurador.

En 2014, el banco estadounidense JP Morgan Chase reportó a las autoridades norteamericanas cientos de operaciones financieras irregulares que involucraban a empresas y personas vinculadas al Banco Caroní de Venezuela, entre ellas Edmundo Kabchi. Según el reporte, Kabchi habría recibido más de 4 millones de dólares en cuentas suizas desde un banco de Barbados, el Continental Bank, propiedad de los directivos del Banco Caroní.

El reporte también señalaba que muchas de las transacciones habían sido enviadas por una casa de valores panameña, Inversiones y Valores Capital Markets, en la que los hermanos De Grazia, otra familia oriunda de Guayana, tenían intereses. Los De Grazia son conocidos por su actividad política y empresarial en el estado Bolívar.

El JP Morgan Chase sospechaba que las operaciones estaban relacionadas con el mercado negro de divisas en Venezuela y con el lavado de dinero proveniente de la corrupción oficial y el fraude financiero. El banco había emitido previamente otros once reportes sobre el Banco Caroní y sus subsidiarias por actividades similares.

Aun cuando algunos creen que detrás de Kabchi Zakia pudiera ocultarse una máquina de blanqueo de dineros opacos vinculados al chavismo, el venezolano-libanés no ha tenido mayores problemas a la hora de realizar negocios en el futbol español.

El Málaga CF desciende a la tercera categoría tras una temporada de pesadilla e inicia su reestructuración

El Málaga CF ha vivido una de las temporadas más difíciles de su historia, que ha terminado con el descenso a la Primera RFEF, la tercera categoría del fútbol español. El club ha sufrido una grave crisis institucional, económica y deportiva que le ha impedido competir al nivel que se esperaba.

La crisis institucional se debe a la situación judicial del jeque Al Thani, el accionista mayoritario del club, que está siendo investigado por presuntos delitos de apropiación indebida, blanqueo de capitales y administración desleal. El club está bajo la administración judicial de José María Muñoz desde hace tres años por orden de la jueza María de los Ángeles Ruiz. Esta situación ha provocado una falta de recursos económicos y una gestión deficiente que ha afectado al rendimiento deportivo.

La crisis económica se ha traducido en una reducción drástica del presupuesto del club, que pasará de unos 17 millones de euros esta temporada a unos 7 o 14 millones la próxima, según el escenario más pesimista u optimista. El club tendrá que hacer frente a un nuevo Expediente de Regulación de Empleo (ERE), el tercero en cuatro años, que afectará a empleados y jugadores. Además, el club perderá ingresos por derechos de televisión, patrocinios y taquilla al jugar en una categoría inferior.

La crisis deportiva se ha reflejado en los malos resultados del equipo, que ha estado 40 de 42 jornadas en puestos de descenso. El equipo ha tenido tres entrenadores diferentes: Guede, Mel y Pellicer. El primero fue destituido tras solo seis partidos y tres puntos. El segundo duró 18 jornadas con 18 puntos. El tercero logró una racha positiva al final de la temporada, impulsada por un gol agónico del canterano Alex Calvo ante Las Palmas, pero no fue suficiente para evitar el descenso. El equipo ha jugado con 35 futbolistas diferentes, muchos de ellos jóvenes o cedidos, y ha sufrido siete expulsiones. El único consuelo ha sido el veterano Rubén Castro, máximo goleador del equipo.

La afición ha mostrado su descontento con la directiva y ha pedido la venta del club. En el último partido de la temporada ante el Ibiza, los aficionados protestaron fuera y dentro del estadio, vistiendo de negro y entrando con retraso. Al final del encuentro hubo enfrentamientos con la policía y algunos radicales intentaron acceder al vestuario para pedir explicaciones a los jugadores. La afición recuerda con nostalgia los tiempos en los que el club se enfrentaba a otros fuertes rivales en Europa y fichaba a estrellas como Cazorla, Baptista o Isco.

El club se quiere reconstruir con una base de cantera y algunos jugadores veteranos que quieren seguir en el equipo. La dirección deportiva estará a cargo de Loren Juarros, exjugador y exdirector deportivo del Betis. El entrenador será probablemente Pellicer, que tiene interés en continuar. La columna vertebral del equipo se quiere formar con el portero Rubén Yáñez, el centrocampista Lago Junior y el delantero Rubén Castro. El objetivo es volver cuanto antes al fútbol profesional y recuperar la ilusión de una afición que lo necesita.