El despliegue de tropas de EE. UU. en el Caribe ordenado por el presidente estadounidense, Donald Trump, constituye el inicio de una guerra contra el narcotráfico y, principalmente, contra el Cartel de los Soles —designada por el Departamento del Tesoro como organización terrorista global—, el Tren de Aragua y el Cartel de Sinaloa, así como contra el radio de acción de estas organizaciones criminales. La respuesta del régimen de Nicolás Maduro es la desinformación.
Se trata de una acción que es una continuación de esfuerzos previos desarrollados desde los años ‘80 y no una invasión a Venezuela, como sugiere el régimen de Nicolás Maduro. Es una operación, enmarcada en una estrategia más amplia contra el crimen organizado transnacional y el narcoterrorismo que generó una campaña de desinformación por parte del régimen venezolano, que la presenta como una inminente invasión.
Y aunque Diosdado Cabello ha tratado de minimizar la situación y niega la existencia de grupos como el Tren de Aragua y del propio Cartel de los Soles, a pesar de las recientes detenciones, es notoria la afectación que el régimen chavista experimenta frente al accionar del gobierno estadounidense.
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Despliegue de tropas de EE. UU. en el Caribe
Con el despliegue de tropas de EE. UU. en el Caribe comienza la guerra contra el narcotráfico
El Departamento de Estado de Estados Unidos confirmó recientemente el despliegue de fuerzas aéreas y navales en el sur del Mar Caribe. La operación busca «contrarrestar todas las amenazas de los carteles de la droga latinoamericanos como el Cartel de los Soles, el Cartel de Sinaloa, el Tren de Aragua y otras organizaciones terroristas globales designadas por la administración estadounidense.
La acción militar desplegada en principio, incluye al menos dos buques de guerra y un incremento en la vigilancia aérea para recolectar inteligencia y neutralizar las operaciones de narcotráfico.
Es importante advertir que estas operaciones no son una novedad, por cuanto se vienen ejecutando desde 1980. Tal es el caso de intervenciones como la ocurrida en 1986 con Bolivia; o contra los carteles colombianos como el de Medellín y Cali en la década de los años ‘80; también en los años ’90, la Operación Soporte de Justicia contra el Cartel del Sol en Venezuela y Colombia; el Plan Colombia del año 2000 en adelante; y una operación especial en abril de 2020, bajo la primera administración de Donald Trump contra el Cartel de los Soles.
Se trata, pues, de una misma estrategia, con un enfoque renovado surgido de la designación de nuevas organizaciones criminales como terroristas globales.
Objetivo del despliegue de tropas de EE. UU. en el Caribe
La operación actual de despliegue de tropas de EE. UU. en el Caribe se enfoca en los carteles latinoamericanos, específicamente, el Cartel de los Soles, el Cartel de Sinaloa y el Tren de Aragua, tres organizaciones criminales designadas como organizaciones terroristas globales.
La designación de estos grupos como terroristas, conlleva una serie de acciones protocolizadas, pero es necesario puntualizar que no se trata de una invasión, pues no está previsto que llegue un equipo de estadounidenses de marines para “sacar a Maduro y llevárselo preso”, tal como se ha hecho creer.
Debe recordarse que el jefe del Comando Sur en 2020 también aclaró que la operación de aquel entonces tampoco buscaba invadir a Venezuela ni derrocar a Nicolás Maduro, sino que solamente se emprendía en procura de luchar contra el narcotráfico.
La actual operación busca cortar la presencia y el negocio del narcotráfico de los carteles de la droga y se vincula con la crisis de opioides en la población en Estados Unidos. También se relaciona con la seguridad fronteriza en EE. UU., pues se considera una «amenaza a la seguridad nacional estadounidense.
La narrativa y respuesta del régimen venezolano
La narrativa del régimen de Maduro ha sido la desinformación
Como respuesta al despliegue de tropas de EE. UU. en el Caribe, el régimen de Maduro inició la promoción de una enorme campaña de desinformación y de propaganda.
Tal movida desinformativa es replicada a través de la amplia red de medios creados y controlados por el chavismo, así como por su grupo de influenciadores que, por las diversas redes sociales, difunden información falsa sobre una supuesta invasión de marines a Venezuela.
Diosdado Cabello señaló que Venezuela va a responder al operativo de los Estados Unidos y aseguró que están preparados. Esta afirmación del ministro y dirigente chavista no es más que una bravuconada, toda vez que las Fuerzas Armadas venezolanas no están preparadas para enfrentar un día de combate con ningún ejército, muchísimo menos si dicho ejército es el de EE. UU.
Las manipulaciones informativas de Diosdado Cabello
También cuando Diosdado Cabello cita un informe de la ONU para afirmar que en Venezuela no hay producción de ningún tipo de droga y es territorio libre de producción; que no hay laboratorios para el procesamiento de drogas en ninguna parte de Venezuela, pues igualmente es territorio libre; así como que el informe de Naciones Unidas señala que Venezuela no es territorio de tránsito de la droga; es igualmente información manipulada.
Cabello, obvia decir que el informe de la ONU se basa en datos proporcionados por los propios gobiernos —como la ONA en Venezuela, controlada por los mismos carteles—, al tiempo que miente cuando sostiene la inexistencia de laboratorios y producción de droga en territorio venezolano.
Es decir, el régimen venezolano utiliza datos medianamente serios o verificables —como informes de la ONU— y los envuelve en su propio discurso para construir falsas narrativas.
El régimen de Nicolás Maduro critica las operaciones de EE. UU. y las cataloga como «militarización de la región» y tacha a los países que cooperan como «arrodillados», una narrativa destinada al fracaso, por cuanto para que sea exitosa requiera que haya gente que la crea, algo que ya no ocurre.
Tren de Aragua y sus vinculaciones con el régimen venezolano
Una serie de hechos vinculan al régimen venezolano con el Tren de Aragua, entre ellos, la captura en Santiago de Chile del “Gordo Alex”, como se conoce a Alfredo José Henríquez Pineda, de 30 años. A este hombre se lo señala de participar y ser miembro responsable de la facción del Tren de Aragua conocida como “Los Piratas”. Es uno de los autores materiales del asesinato político del exteniente venezolano, Ronald Ojeda.
La Fiscalía de Chile, sustentada en testimonios, comprobó la vinculación de este sujeto con el asesinato de Ojeda y con el régimen de Maduro. Diosdado Cabello es uno de los indiciados por parte de uno de los interrogados.
Pero a pesar de las pruebas, el régimen de Maduro y Diosdado Cabello dicen que el Tren de Aragua no existe.
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