Los bolichicos siguen con enfados, intimidaciones, y amedrentamiento. Ahora la cuestión no es legal, es canallesca y facinerosa. Como en toda gran confabulación política no es el delito en sí, sino el “cover-up” donde sale a lucir el hueso de la cosa. A [email protected] llegan los correos con escalofriantes anécdotas. Protegemos la confidencialidad y el anonimato, y he comprobado lo recibido. A mas de un tuitero que se arriesgó a escribir algo públicamente denunciando a los bolichicos de Derwick le ha llegado un ultimátum directo. A un tuitero que vive en el exterior lo llamaron para decirle que cuando regrese a Venezuela en Diciembre “asuma las consecuencias.” Otra persona nos escribe que los bolichicos no perdonan y que por llevarle la contraria a Alejandro Betancourt no aspira a “que me vayan a secuestrar y vaya yo a pasar un mes en el Amazonas en manos de delicuentes.” Otro que nos escribe colgó algo en Facebook, y el mismo Francisco Convit lo llamó para decirle que si no quitaba el enlace de su pagina de FB un familiar de esta persona la vería mal en Venezuela. A la vez que ocurre todo esto el padre de varios Bolichicos, Domingo Guzmán de Frutos, los defiende a con capa y chequera (y ofrece pasajes y hotel con una explicación de cómo sus chamos –sin tener experiencia– se metieron a billonarios). Pero lo que nos llegó ayer fue un tuit que colocó el hacker de Derwick, Rafael “RaFa” Núñez, con un reto a un pariente de los bolichicos que se atrevió en una ocasión a criticarlos: Rafael Alfonzo. El tuit dice: “Rafael Alfonzo no te escondas que tú tampoco te salvas.”
Y el enlace del esbirro electrónico de Derwick es un video en el sitio estadounidense Vimeo, con el título “mi camarita lo ve todo.” El video de 23 segundos viene de una cámara que los bolichicos instalaron en la habitación particular del hogar de Alfonzo, presidente de CEDICE-Libertad.
A esto han llegado estos dizque “empresarios” venezolanos resueltos a meterle miedo a todo aquel que los desafíe.
Parece que las amenazas llegaron hasta el sitio Runrunes de Nelson Bocaranda. Me pareció ilógico que un artículo, escrito por Luis Miguel Colmenares con el título “Sin valores no hay paraíso ‘bolichicos’ desapareció horas después de ser publicado. ¿Censura en Runrunes? El sorprendido autor lo publicó varios días más tarde en otro sitio web.
¿Acaso Venezuela no sufrió (y bastante) con Amos del Valle y Apóstoles que controlaban las cortes y la policía? Y ahora, con poderes públicos chavistas que de nada sirven, tenemos a una banda de malandrines que se meten en casas privadas y colocan cámaras. No olvidemos que su hacker experto en seguridad también le hace los trabajitos a Ramiro Helmeyer, Juan Carlos Escotet, Nervis Villalobos, y Smartmatic entre otros conocidos hampones venezolanos. Vaya colección de personajes con un grado de separación.
¿Que dirán al respecto la cofradía del Country Club que les dio vida o sabiduría a los bolichicos? Domingo Guzmán, Mari Parra, Lilia López, el Dr. Pedro Trebbau, Pura Casado, Leopoldo Betancourt, Edgar Romero Navas, y el Dr. Jacinto Convit. ¿Estarán orgullosos de la obra de sus hijos y nietos? No me refiero a las «asombrosas» plantas eléctricas que tanta luz nos dan (con un sobreprecio mil millonario) sino a la guerra sin cuartel de los bolichicos en contra de aquellos que perciben como sus adversarios.
Me critican que uso la palabra “mafia” para referirme a sus primogénitos.
Veamos: una cámara en la habitación de un particular que se atrevió en una ocasión a criticarlos; una amenaza de secuestro a un tuitero, una advertencia a otro en Facebook, y no olvidemos el vilipendio a los Mezerhane, Garcia Mendoza, y otros a quienes le han declarado la guerra a traves de sus palangristas. Hace seis días en otra cuenta Twitter de “RaFa” pusieron las direcciones de correo y las contraseñas de otros que Derwick ha declarado como enemigos.
La violencia es lo único que les falta.
¿Que me harían a mi si descubren mi identidad?
Impunes, poderosos, y con todos esos reales robados, qué creen Uds. que pasará si estos se salen con la suya en la Venezuela del post-chavismo?
Yo no me rindo.
En su afán de patoteros lo que nos muestran los bolichicos Convit, Trebbau y Betancourt es que ellos están aterrados. El poder lo tenemos nosotros quienes alzamos la voz.