Dentro del Sebin, la rama de la inteligencia venezolana dedicada a la tortura y el narcotráfico

(Traducción libre de MiamiDiario)

El Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional, Sebin, se ha vuelto famoso por las constantes denuncias de abuso y violación de los derechos humanos en Venezuela, pero un reportaje de FOX Inside Venezuela’s torturous intelligence and drug-running branch SEBIN (Dentro del Sebin la rama de la inteligencia venezolana dedicada a la tortura y el narcotráfico) le atribuye un importante rol en el tráfico de drogas en el país caribeño.

En octubre, Fernando Alban, el concejal del partido político venezolano Primero Justicia, se pronunció en contra Nicolás Maduro en las Naciones Unidas en Nueva York.

A su regreso en el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar fue capturado por el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin). Tres días después, Alban cayó desde el décimo piso de la sede organismo de inteligencia del régimen venezolano mientras era interrogado.

La versión oficial es la del suicidio, pero muchos sospechan que su muerte es responsabilidad del cuerpo de seguridad e inteligencia más temido del país.

Bajo la dirección de la Vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, los organismo de seguridad del régimen tienen un extenso registro de violaciones de los derechos humanos y acusaciones de tortura contra quienes se oponen al régimen de Maduro.

Tentáculos en todo el país

«El Sebin opera en todo Venezuela realizando labores de policía política«, dijo a Fox News Johan Obdola, fundador de la firma de Seguridad e Inteligencia centrada en América Latina, IOSI. “Tiene como objetivo la neutralización de quienes se opongan al régimen dentro y fuera del país. Son los más temidos”.

La cuartel de operaciones del Sebin está en El Helicoide en el sur de Caracas, además tiene una prisión críptica que los lugareños llaman La Tumba, ubicada cinco pisos por debajo de la superficie en Plaza Venezuela en el centro este de la capital, pero se habla de que ha establecido despachos y ubicaciones satélites por todo el país.

Algunos dicen que los agentes también operan en representaciones diplomáticas venezolanas en varias partes del mundo. En 2012, el Nuevo Herald informó que alrededor de una docena de presuntos agentes del Sebin que venían operando en la sedes diplomáticas en los Estados Unidos fueron obligados a irse.

Durante décadas el organismo fue conocido como Dirección Nacional de Servicios de Inteligencia y Prevención (DISIP) hasta que el ex presidente Hugo Chávez cambió el nombre en 2009. Su participación en el comercio de drogas se incrementó alrededor de 2006, dijeron fuentes bien informadas. El impulso se produjo solo unos meses después de que Chávez expulsara a la Agencia de Control de Drogas de los Estados Unidos (DEA) de Venezuela.

Narcotráfico de la mano de Chávez

FOX conversó con un desertor, de 54 años, del gobierno venezolano, que solo puede ser identificado por el seudónimo de Ras (para proteger a los familiares que aún mantiene dentro del país) quien sirvió como un fiel agente de inteligencia durante mucho tiempo, cercano a Hugo Chávez y que llegó a los mandos superiores del Sebin con el rango de comisario.

Ras narra a FOX que se retiró a finales de 2014, cuando » la agencia recibió la orden de implementar un nivel de represión contra los manifestantes» demasiado difícil de entender», y, en su opinión, los narcóticos pasaron a ser demasiado importantes en sus propias misiones diarias.

El narcotráfico se disparó alrededor de 2004, y en 2007 saltó a un nuevo nivel-subraya Ras-. Chávez ordenó personalmente misiones encubiertas para enviar cocaína a Estados Unidos y Europa, en coordinación con los rebeldes de las FARC en la vecina Colombia, y luego a través de los carteles mexicanos que estaban activos en empresas transfronterizas.

“Walid Makled era un importante capo de la droga en Venezuela que recibió grandes contratos del gobierno venezolano. Más tarde, las operaciones de drogas de Walid Makled comenzaron a molestar a Chávez. En 2008, le ordenó a Tareck El Aissami, para el momento ministro del Interior, que «sacrificara» a Walid -dijo Ras. – Así que Tareck ordenó el arresto de Walid, luego Chávez ordenó a Tareck que se hiciera cargo de la operación de drogas, ya que esta acción contra Estados Unidos no se podía detener».

A principios de 2017, Maduro nombró a El Aissami para que fuera su vicepresidente y, por tanto, quedó a cargo de la función crítica de supervisar el Sebin.

El Aissami, hijo de madre libanesa y padre sirio, es uno de los hombres más ricos del país y por años ha estado bajo investigación por parte de los fiscales de los Estados Unidos por tener relaciones cercanas con Hezbolá y con el financiamiento del narcotráfico.

Tareck El Aissami permaneció como vicepresicente hasta junio de 2018, cuando fue designado como Ministro de Industrias y Producción Nacional.

Centro estratégico del naroctráfico

“Venezuela no solo es un país de operaciones internas de carteles de drogas, sino un centro estratégico, no solo para los dos carteles del gobierno venezolano, hay otros grupos regionales e internacionales de drogas, criminales y terroristas que operan con la protección y el apoyo del régimen», enfatizó Ras. “La mayoría de estas drogas llegan a Estados Unidos y Europa, a través de México, República Dominicana, África, Brasil. La mayoría del personal militar en Venezuela está involucrado en estas operaciones en todos los niveles de la nación”.

Ras también subrayó que desde hace años los miembros de Hezbollah, que se benefician en gran medida del refugio en Venezuela y que operan desde la triple frontera, entre Argentina, Paraguay y Brasil, han estado recibiendo pasaportes venezolanos.

«A partir de 2010, de diez a quince hombres llegan cada dos o tres meses a una unidad militar en particular, el Batallón de Infantería Paracaidista José Leonardo Chirino, donde se les alimenta y se les lleva a la Oficina Nacional de Identificación (Saime) en el estado de Aragua, ahí reciben la identificación de Venezuela, incluídos pasaportes «, recordó. «Luego se envían a otras naciones latinoamericanas, algunos en la aerolínea Cubana de Aviación, que viaja a Cuba, así como a otras islas del Caribe».

Un periodista de Caracas señaló que «todo el mundo sabe que esto está sucediendo, pero el grado en que ha estado ocurriendo la operación de drogas es mucho más elaborado de lo que nadie pensaba».

Silenciar la disidencia

Emanuele Ottolenghi, miembro principal y experto en América Latina de la Fundación para la Defensa de las Democracias (FDD), describió al Sebin como un servicio que debería funcionar como la versión venezolana del FBI, pero en la práctica es «una herramienta estatal de represión política utilizada para silenciar a la disidencia y aterrorizar a los oponentes «.

“El Sebin se mantuvo hasta hace muy poco, como el látigo que el régimen usaba para quebrar a la disidencia. En los últimos días, han comenzado a surgir preguntas con respecto al posible papel de algunas figuras de alto nivel en el cambio de lealtades y en la búsqueda de salir de Maduro– dijo. -No obstante, sigue siendo una herramienta formidable de represión».

Ottolenghi estuvo de acuerdo en que la agencia es el cerebro detrás del creciente tráfico de drogas.»Brindaron protección al menos un capo de la droga clave y trataron de aprovechar su largo alcance para tomar como rehén a un periodista estadounidense en un intento por cambiarlo por los dos sobrinos del presidente Maduro, luego de que fueron detenidos en los EEUU por cargos de drogas», apunta.

Los sobrinos de Maduro, criados por su esposa Cilia Flores, fueron sentenciados a 18 años de prisión a fines de 2017, dos años después de ser extraditados a Estados Unidos desde Haití y condenados por cargos de narcotráfico.

Ras está lejos de sorprenderse de que, dada la fortaleza del Sebin y el financiamiento por las drogas, el régimen no se desmorone en la que una vez fue una nación próspera y rica en petróleo. «Es extremadamente difícil ya que hay una estructura criminal y terrorista complicada que apoya a Maduro», afirmó.

Obdola coincide en que, desde la llegada de Maduro al poder en 2013, el Sebin ha «radicalizado sus acciones violentas contra la oposición, los manifestantes y el resto de la población civil».

«Al estar bajo la orden directa de al Vicepresidencia del país, el Sebin incluso puede mantener presos a los políticos después de que un juez les ha emitido la orden de liberación», continuó.

No obstante, los EEUU están generando incentivos para que incluso los agentes del Sebin abandonen al régimen.

A principios de este mes, al general Manuel Cristopher Figuera, quien fuera jefe de este servicio de inteligencia desde octubre del 2018 y luego fuera sancionado por los Estados Unidos, se le retiraron esas sanciones después de manifestar su reconocimiento a Juan Guaido como presidente encargado de Venezuela. Él es el oficial de más alto rango hasta el momento que ha desconocido al régimen Maduro.

Etiquetas: DEA, Derechos Humanos, FBI, narcotráfico, SEBIN, Tareck Zaidan El Aissami Maddah, Walid Makled

Tomado de Dentro del Sebin, la rama de la inteligencia venezolana dedicada a la tortura y el narcotráfico