VenePirámides
Los reguladores financieros de Louisiana sabían desde el año 2007 de los problemas con los CD’s de Stanford International Bank pero no advirtieron a los inversionistas, señala un “class-action” (demanda colectiva) presentada el jueves en Baton Rouge, Louisiana, reportó 2 The Advocate.
La demanda alega que los 86 demandantes, en su mayoría personas de edad avanzada, invirtieron los ahorros de sus vidas en Stanford Trust Co., domiciliado en Louisiana, y lo perdieron todo. La demanda sostiene que el Estado de Louisiana, Stanford Trust y otros «hicieron la vista gorda frente al fraude que Stanford orquestaba.» «Su inacción fertilizó el terreno para que el fraude fuera exitoso, lo que causó enormes daños a los demandantes y sus familias», sostiene la demanda.
La demanda, presentada en la Corte de Distrito, alega que la Oficina de Instituciones Financieras de Louisiana (OFI) informó a Stanford Trust en el 2007, que debía cesar la comercialización de Certificados de Depósito de Stanford International Bank a causa de la necesidad de diversificar los activos de sus clientes y debido a los riesgos asociados con la operación del banco «off-shore» de Antigua.
La demanda también alega que la OFI informó a Stanford Trust que todos los CD’s de Stanford International Bank debían ser removidos del fideicomiso («Trust») en el 2008, debido a los riesgos asociados con los CD’s y la incapacidad de SIB de informar a la OFI de la naturaleza de los activos en los cuales se invertía el producto de los CD’s.
«La OFI ya conocía de los riesgos asociados con la venta de los CD’s de SIB, y sin embargo el Estado de Louisiana no hizo nada para cambiar los procedimientos operacionales de Stanford Trust para evitar una catástrofe o informar a los demandantes de los nuevos riesgos percibidos por OFI» señala la demanda.
La mayoría de los demandantes son del sur de Luisiana, pero algunos viven en Mississippi, Texas, Carolina del Sur, Colorado, Missouri y Virginia.
Tomado de Demandan al Estado de Louisiana por su reponsabilidad en el fraude de «Sir» Allen Stanford