El testimonio de Alejandro Andrade dará contexto al amplio listado de evidencias.
Por Maibort Petit
Al iniciarse este lunes 28 de noviembre las audiencias de juicio contra la extesorera de Venezuela, Claudia Patricia Díaz Guillén, y su esposo, Adrián Velásquez Figueroa, en el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Sur de Florida, la fiscalía homónima busca comprobar los delitos de lavado de dinero que se les imputa con un arsenal que incluye 1.171 evidencias, de acuerdo al listado difundido por el gobierno.
Díaz Guillén y Velásquez Figueroa son señalados de integrar una trama de corrupción que permitió al supuesto cabecilla de la misma, a saber, Raúl Gorrín, propietario de la televisora Globovisión y Seguros La Vitalicia, amasar una fortuna de miles de millones de dólares a la sombra del sistema de control de cambio imperante en Venezuela. Esto habría ocurrido, tanto en la administración del finado expresidente, Hugo Chávez, como de su sucesor, Nicolás Maduro, cuando de facto fue liberado en los últimos años de su gobierno. A través del diferencial cambiario el empresario se habría hecho de las millonarias ganancias que supuestamente fueron lavadas en el sistema financiero y el mercado inmobiliario de los Estados Unidos. Los acusados, señalados de recibir sobornos millonarias —calculadas en USD 65 millones— por parte de Gorrín, las cuales, igualmente, habrían sido lavados en el sistema financiero de EE. UU.
En las 22 páginas del extenso listado de pruebas, se incluye el testimonio de expertos en economía, fotografías, facturas, correos electrónicos, comprobantes de depósito y transferencias bancarias, chats, leyes y resoluciones de gobierno venezolanas, el gobierno cree que hay suficientes elementos que les permitirán comprobar que Claudia Díaz Guillén continuaron la trama de corrupción que Gorrín presuntamente comenzó con su antecesor en el cargo, Alejandro Andrade, quien se declaró culpable de la comisión de delitos de lavado de dinero que ahora colabora con la justicia.
Y sería, precisamente, el testimonio de Andrade, convertido en testigo estrella de la fiscalía en este juicio, el que ayudará a darle contexto al voluminoso legajo de evidencias que se presentarán ante el juez de la causa y el jurado, aspirando con ello los fiscales que este último declare la culpabilidad de los acusados.
Cabe destacar los múltiples esfuerzos de Díaz y Velásquez para evitar que los fiscales suban al estrado a Alejandro Andrade, alegando para ello la violación de los procedimientos de ley y el debido proceso. Una argumentación que no fue aceptada por el Tribunal que declaró la inadmisibilidad de la moción presentada por la defensa para ello.
Por su parte, como ya lo hemos señalado en entregas anteriores, la defensa presentará ante la Corte y el jurado 57 documentos que, de acuerdo a su visión de los hechos, comprobarían la inocencia de sus representados.