Tras la decisión de la procuradora, Margarita Cabello, de suspender temporalmente a Daniel Quintero de su cargo, el Presidente de la República, Iván Duque, designó al alto comisionado para la paz, Juan Camilo Restrepo Gómez como alcalde encargado de Medellín.
Restrepo es un político y empresario que se ha caracterizado por ser opositor a la paz, por fomentar y justificar a las cooperativas Convivir, representó y exculpó a los empresarios bananeros de escándalos del narcotráfico y cuenta con familiares contratados en entidades públicas gracias a Federico Gutiérrez.
Restrepo Gómez, ha sido fuertemente cuestionado por su cercanía con el Grupo Empresarial Antioqueño, GEA, y es claro que durante su estadía en las toldas fajardistas, se evidenció una estrecha relación en la que primaba el favorecimiento de los intereses de ese grupo empresarial. Ejemplo de ello es la hidroeléctrica de Ituango o Hidroituango, proyecto del que se beneficiaron solamente las empresas de ese grupo, reseñó NTN24.
En 2021, cuando Duque designó a Restrepo como comisionado para la paz, su nombramiento generó indignación, pues el ahora “alcalde”, fue un fiel opositor al acuerdo firmado en La Habana. Además, se ha pronunciado en favor de las Convivir, supuestas empresas de seguridad que desencadenaron el paramilitarismo en el país.
Mientras estuvo como presidente de Augura, cargo que tuvo hasta el 2019, destacó por hacerle oposición al acuerdo de paz, tanto así que se metió de lleno en la campaña por el NO, liderada por Juan Carlos Vélez y recordada por la frase “hay que sacar a la gente a votar berraca”. De acuerdo con el portal Cuentas Claras, Restrepo por medio del gremio de bananeros que dirigía, aportó por lo menos 33 millones de pesos a esta causa del uribismo.
Sospechosamente de lo anterior solo hay registro en entrevistas y declaraciones públicas de Restrepo, dado que en sus redes sociales fue eliminada cualquier evidencia de su apoyo a la campaña por el NO al plebiscito. No obstante, durante su campaña a la Gobernación de Antioquia en 2019, este fue uno de los temas que salió a la luz y por el que se le cuestiona. ¿Por qué no aparecen los tuits?
Además de esta financiación, la Asociación de bananeros que representaba Restrepo hasta el 2016, también financió la campaña de otra fuerte opositora del proceso de paz y uribista aliada de Federico Gutiérrez. Se trata de Paola Holguín, quien también es señalada porque su familia actuó como testaferra del cartel de Medellín.
Por otro lado, durante una entrevista con Verdad Abierta, Restrepo Gómez salió en defensa de las Convivir ante una pregunta en la que le dijeron que estas fueron fachadas del paramilitarismo. “Es que eso no es una fachada, así se daba la plata para la Convivir. Ahora quieren relacionar eso con que era una fachada para los paramilitares, eso es una generalidad y una estigmatización que no compartimos” sostuvo Restrepo.
Lo anterior no debería extrañar a nadie, teniendo en cuenta que el mandatario encargado ha liderado agrupaciones bananeras con fuertes cuestionamientos por financiar o aliarse con grupos paramilitares. Por lo tanto, detrás de su apoyo al NO, también existiría un conflicto de intereses, principalmente con puntos del acuerdo como la reforma rural integral y la Jurisdicción Especial para la Paz.
Adicionalmente se conoció que el pasado 10 de mayo, Restrepo Gómez, insistió en la propuesta de volver a crear los llamados “frentes de seguridad” que son un mecanismo similar al paramilitarismo en el que se compromete a la población a actuar en el conflicto sirviendo como informantes de las fuerzas de seguridad y desarrollando trabajo de inteligencia.
Dicho mecanismo es contrario al Derecho Internacional Humanitario, que exige que la población civil no sea incluida en ningún tipo de acción de guerra.
Pese a que Restrepo ha negado en varias ocasiones los nexos del gremio bananero con el paramilitarismo, lo cierto es que, el empresario bananero y paramilitar, Raúl Emilio Hasbún alias “Pedro Bonito”, confirmó, por medio de una declaración ante la justicia, la relación que existía entre los bananeros y los paramilitares en el Urabá y Córdoba.
No está de más recordar que la Fiscalía tipificó la financiación voluntaria por parte de los gremios bananeros a los grupos paramilitares como un delito de lesa humanidad. Con la finalidad de que este tipo de delitos no prescriban en el tiempo. Debido a lo anterior, varias empresas bananeras deberán responder ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) por sus nexos con estas organizaciones criminales.
Además, durante su periodo como presidente de AUGURA (de 2014-2019), esta asociación estuvo involucrada en al menos 15 casos de incautaciones de cocaína en cajas de banano con destino a puertos europeos.
Según los registros periodísticos, en 2016 autoridades colombianas incautaron 8 toneladas de cocaína en una plantación de bananos con destino a Estados Unidos de la banda criminal Úsuga de Turbo, Antioquia. Asimismo, entre 2014 y 2015 fueron incautados más de 520 kg de cocaína en tiendas alemanas provenientes de las bananeras Turbana y Unibán. Esta última empresa es conocida en Europa porque en 2014 le incautaron 4 embarcaciones cargadas de drogas.
En marzo de 2016, se encontraron 3 toneladas de cocaína camufladas en un contenedor de banano procedentes de Colombia en el puerto de Amberes, Bélgica y en julio de ese mismo año, se encontraron 2,3 toneladas de cocaína que estaban escondidos en cajas de banano en Bucarest, Rumania, estos procedentes de Colombia y otros países vecinos.
Adicionalmente, su asociación de empresas bananeras logró un millonario beneficio, justo al iniciar la alcaldía de Federico Gutiérrez. La negociación incluyó la creación de un distrito de riego para 200 mil hectáreas de banano en el Urabá, que le costaron a la nación 12 mil millones de pesos de los cuales, EPM, bajo el mando de Fico y del GEA, aportaron 2 mil millones.
En 2006, Juan Camilo Restrepo se desempeñó como asesor legislativo del Ministerio de Defensa Nacional. Durante esta época el país vivió una de las fases más crueles de la guerra, entre muchas cosas porque se consolidó la política de Seguridad Democrática la cual dejó un saldo de 6.402 civiles inocentes ejecutados para hacerlos pasar por miembros de los grupos armados al margen de la Ley.
Durante la época de Restrepo como asesor del Ministerio de Defensa se dió la funesta desmovilización de paramilitares, la cual además de beneficiar a los “paras”, también benefició a narcotraficantes de forma ilegal.
Con la “desmovilización” le permitieron a los criminales de estas bandas transitar libremente por el país sin ningún tipo de represalia por sus delitos y como si fuera poco, de este proceso se beneficiaron a más del doble de desmovilizados ‘paras’ que se esperaba, es decir, este proceso contó con cerca de 15.000 señalados, un número que por mucho superaba a los identificados al inicio por el gobierno, lo que permitió incluir narcos, reciclados y falsas desmovilizaciones que se dieron a lo largo del proceso, como se sabría años más tarde.
Siga leyendo en NTN24
Tomado de Así son los escándalos en torno a Camilo Restrepo Gómez, alcalde (encargado) de Medellín