“Aún estamos un poco estupefactos por esta operación que involucró la compra de 33 millones de acciones a 3.500 Bs/acción. Estupefactos de que la Junta Directiva haya considerado que esta era la mejor opción de hacer uso de 115.500.000.000 bolívares (son muchos ceros) para beneficiar a los accionistas. Este monto, empleado para comprarle a un accionista financiero como lo era JP Morgan a un precio que difícilmente pueda ser considerado de oportunidad, es equivalente a haber repartido un dividendo en efectivo de 210 Bs/acción, con lo cual se hubiese satisfecho el creciente reclamo de una gran número de accionistas que consideran inadecuada la política de dividendo en efectivo que ha ofrecido hasta ahora la Gerencia. Es de hacer notar que con esta operación casi se copa el máximo de acciones que puede recomprar Mercantil (15% del capital suscrito), por lo que parece que pronto se quedará sin municiones este instrumento creado para “beneficiar a los accionistas” (el cual no ha servido demasiado para revalorizar las acciones de Mercantil si se toma en cuanta el evidente rezago que presenta frente a otros títulos similares). Las primeras 37.697.189 acciones recompradas desde mayo del 2000 (¡durante más de cuatro años!) costaron 36.932 millones (menos de 1.000Bs/acción) o casi la cuarta parte de lo que costó el lote de menor tamaño que poseía JP Morgan. A parte de la v er sión oficial de que “la negociación es una muestra de la confianza que tiene Mercantil en el desarrollo de Venezuela”, otras de las cosas que han llegado a nuestros oídos es que con esta operación se evita ba la entrada de algún accionista “indeseable”. ¿Indeseable para quién? ¿Y tal vez no hubiese sido mejor buscar a un nuevo accionista “deseable” que desmontará a JP Morgan de su posición y permitido que en algún momento se pagase un dividendo en efectivo decente? Otra cosa que hemos escuchado es que la Gerencia de Mercantil va a repartir las acciones compradas a JP Morgan como un dividendo (no sería nada espectacular, serían unas 3 acciones nuevas por cada 50 en tenencia), en vez de extinguirlas como ha hecho con las recompras anteriormente. Esto tampoco puede constituir un consuelo, ya que lo que se validaría es algo así como que “todos los accionistas del Mercantil nos pusimos de acuerdo para comprarle a JP Morgan su paquete a un precio históricamente alto. Ahora todos tenemos más acciones”. Más justo hubiese sido que se hubiesen repartido en efectivo los 210 Bs/acción y que cada accionista decidiera que era lo que más le convenía, con una de las opciones siendo el comprar acciones de Mercantil en el mercado secundario. También hemos escuchado que podría venir un dividendo extraordinario en efectivo que calme a los despechados. Aún no descartamos que eventualmente esas noticias puedan borrar el sabor amargo que hoy tenemos, parece que la recomendación inmediata más sensata es vender las posiciones a 3.500 Bs/acción mientras se queman los pocos cartuchos que aún le quedan a la recompra, ya que imaginamos que por los próximos días no conviene que el precio baje de ese nivel y resalte que la compra a JP Morgan se realizó a niveles históricamente altos. Ojalá que la Gerencia ofrezca una mejor explicación de por qué esta operación era conveniente para todos los accionistas, ya que nos parece insuficiente la versión oficial circulada hasta ahora”.