La Corte Federal del Distrito Sur de Florida, en Estados Unidos, condenó a Alejandro Andrade a 10 años de prisión por corrupción. El extesorero de Hugo Chávez aceptó sobornos entre 2007 y 2017 por unos 1.000 millones de dólares. La sentencia se ha conocido este martes. Le dan tres meses para entrar en prisión.
Carlos Vecchio, dirigente en el exilio del partido político venezolano Voluntad Popular, estuvo presente en la audiencia. Según su versión, los abogados de Andrade eran tres personas (dos hacían de intérpretes al extesorero). Por haber colaborado con la Justicia, Andrade se salvó de una pena de 27 años, que es la que sumarían todos los delitos acumulados, según recalcó Vecchio.
Que la entrada en prisión se dilate hasta febrero también se debe a estar colaborando con la Justicia, según destacó Vecchio.
El abogado de Andrade dijo en la audiencia que el extesorero nunca tuvo el dinero en sus cuentas. ¿La respuesta de la Fiscalía? Claro que no lo tenía en sus cuentas, pero estaba a su disposición para cuando quería en mansiones, relojes, caballos… Tenía testaferros a su disposición, siempre según la versión de Vecchio.
Andrade también habló en la audiencia. Leyó una breve carta en español. En ella pedía perdón a su familia y amigos. Se mostraba arrepentido y dijo que asumía sus actos. Recalcó que sigue ayudando a Venezuela. ¿Cómo? Colaborando con la Justicia estadounidense. Se comprometió a seguir colaborando.
Igualmente se mostró profundamente agradecido con la acogida en Estados Unidos, ya que le permitió llevar allí a su familia. Curiosamente quien fuera la mano derecha de Chávez habló maravillas de Estados Unidos, recalcó Vecchio.