15-09-2016 09:24:58 a.m. | Emen.- A 56 años de la creación de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (Opep), Venezuela, como miembro fundador del grupo, continúa sus esfuerzos para estabilizar el mercado internacional de los hidrocarburos, promover un precio equilibrado del crudo que permita mantener las inversiones y asegurar el suministro continuo y estable para las naciones consumidoras.
El ministro de Petróleo, Eulogio Del Pino, recordó a través de su cuenta en Twitter que el año «1960 vio nacer la Opep por iniciativa del Gobierno de Venezuela, para afianzar la defensa del petróleo».
Históricamente, los esfuerzos de Venezuela se han orientado a asegurar el manejo soberano de los recursos energéticos por parte de los países productores de petróleo,frente al dominio de las grandes empresas transnacionales.
El 14 de septiembre de 1960, en Bagdag (Irak), se firmó el acta constitutiva de la Opep, por la iniciativa del ministro venezolano de petróleo de entonces, Juan Pablo Pérez Alfonso, y de su homólogo saudí, el jeque Abdullah Al Tariki.
Antes de la conformación de este grupo, los consorcios internacionales Exxon, Chevron, Mobil, Shell, Texaco, Gulf, British y Petroleum, que eran protegidos por los gobiernos de Estados Unidos y Gran Bretaña, ejercían el control del negocio petrolero a expensas de los países productores, de acuerdo con sus intereses y en concordancia con su situación política y militar.
La resolución que sirvió de base a la creación de la Opep plantea que «los miembros estudiarán y formularán un sistema para asegurar la estabilización de los precios, entre otros medios, por la regulación de la producción con la debida atención hacia los intereses de las naciones productoras y de las consumidoras y a la necesidad de asegurar una entrada estable a los países productores, un abastecimiento suficiente, económico y regular de esta fuente de energía a las naciones consumidoras y una justa ganancia para su capital a quienes inviertan en la industria del petróleo».
Nacionalismo de Pérez Alfonso
Al hablar de la creación de la Opep, es necesario resaltar la figura del político y diplomático venezolano, Juan Pablo Pérez Alfonzo, quien creó una política conocida como el pentágono petrolero, mediante la cual las naciones pudieran alcanzar los mayores beneficios de la explotación y comercialización del crudo, además de defender y conservar este recurso no renovable.
Este proyecto, con un marcado espíritu nacionalista ,se basó en la política de no más concesiones, el principio de participación razonable, la creación de la Corporación Venezolana de Petróleo (CVP) y de la Comisión Coordinadora de la Conservación y el Comercio de Hidrocarburos (Cccch).
Bajo la figura de la CVP, el Gobierno venezolano podía realizar directamente los trabajos de exploración y explotación del crudo.
Para Pérez Alfonzo, los países productores de crudo debían llevar a cabo esfuerzos para que la riqueza generada por esta industria pudiera ser empleada para beneficiar a los sectores más necesitados de la población.
Chávez rescató la Opep
A finales de la década de los 90, la producción de crudo de Venezuela y el resto de los países miembros de la Opep registraba niveles muy por encima de las cuotas establecidas por la organización, lo que originó una caída sustancial en los precios del barril y amenazó la estabilidad económica y social de las naciones productoras y exportadoras de petróleo.
Para el año 2000, el precio promedio del barril de crudo venezolano rondaba los 13 dólares, por lo que el presidente Hugo Chávez emprendió una campaña para rescatar los principios fundamentales de la política petrolera, diseñada por Pérez Alfonzo, y destinada a combatir la caída de los precios producida por el exceso de oferta y la magnitud de los inventarios.
Producto de este esfuerzo, se realizó en Caracas la segunda Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Opep, 25 años después de la primera, que tuvo lugar en Argelia.
El encuentro tuvo como propósito ratificar el compromiso de la organización de suministrar el crudo de manera segura y a precios justos, así como seguir promoviendo que los países productores profundizaran la defensa de su derecho al manejo soberano de sus recursos, frente a las acciones desestabilizadoras de las grandes naciones consumidoras de hidrocarburos.
De este modo, se acordó el restablecimiento de las cuotas de producción fijadas por la institución petrolera para sus integrantes, lo que condujo a una recuperación paulatina del precio del oro negro.
«La Opep le dice al mundo, desde Caracas, que seguimos comprometidos en el suministro, en el flujo de petróleo adecuado, oportuno y seguro al mercado mundial«, afirmó Chávez en su discurso de clausura de la mencionada cumbre.
Acciones conjuntas
En la actualidad, la Opep es considerada la organización de mayor referencia internacional. Cuenta 14 miembros: Angola, Arabia Saudita, Argelia, Ecuador, Emiratos Árabes Unidos, Gabón, Indonesia, Iraq, Kuwait, Nigeria, Catar, Irán, Libia y Venezuela que poseen en conjunto el 78% de las reservas de crudo del plantea y extraen cerca del 40% de los barriles que se comercializan en el mercado.
El Gobierno nacional ha insistido en convocar al resto de los integrantes del grupo a emprender acciones conjuntas que conduzcan al restablecimiento de la estabilidad y el orden en el mercado petrolero, frente a la persistencia de los bajos precios del crudo, que desde finales de junio de 2014 han mermado en más de 60%, como consecuencia de la disminución de la demanda y el aumento indiscriminado de la producción de gas y petróleo de lutitas, por parte de los Estados Unidos.
Ante este llamado, entre el 26 y 28 de septiembre, los países que integran la organización se reunirán en Argelia con otros grandes productores para discutir acciones conjuntas que contribuyan a restablecer el equilibrio del mercado.
De hecho los dos mayores productores mundiales de petróleo, Rusia y Arabia Saudita, acordaron —en el marco de la cumbre del G-20 que se realizó en China— actuar en conjunto, o con otros productores, para promover el repunte del precio del crudo aun nivel justo para productores y consumidores.