Los estadounidenses subieron a un avión de PDVSA que los llevó a San Vicente y las Granadinas. Allí se realizó el intercambio de prisioneros y luego subieron a una aeronave con destino a San Antonio.
Redacción | Primer Informe
Antes de que los estadounidenses retenidos en Venezuela durante años fueran liberados el sábado, algunos de sus familiares en Estados Unidos habían recibido llamadas esa mañana de familias de otros reclusos en la prisión militar venezolana, diciéndoles que habían oído que los hombres estadounidenses habían sido liberados.
«Habíamos escuchado rumores antes que nos decepcionaron, así que no pensamos realmente en nada», dijo Carlos Añez en una entrevista el lunes. Su padrastro, Jorge Toledo, fue uno de los cinco ejecutivos petroleros de Citgo liberados el fin de semana tras haber estado detenidos en Venezuela desde 2017. Originalmente habían sido seis ejecutivos encarcelados conocidos como los «6 de Citgo», pero uno fue liberado en marzo.
Alrededor de la 1:30 de la tarde del sábado, Añez recibió una llamada del Departamento de Estado pidiendo a la familia que acudiera a una llamada en 15 minutos. Una vez que todas las familias estaban en la llamada, dijo Añez, el presidente Joe Biden anunció que todos los ex prisioneros estaban en un avión de regreso a casa y que aterrizarían en San Antonio.
Tras recibir la noticia que tanto habían esperado, las familias se apresuraron a llegar a Kelly Field en San Antonio.
«Nos reunimos con mi padre y con todos los demás en un hangar», dijo Añez, que vive a unas tres horas de San Antonio. «Hubo muchas lágrimas al principio, y luego el ambiente fue increíble. Todo el mundo estaba muy contento».
El sábado, aparte de su padre, «a la mayoría de ellos los conocí por primera vez», dijo Añez de los otros presos recién liberados, «y sin embargo sentí que los conocía y que ellos me conocían a mí. Hemos tenido esta especie de relación desde lejos durante cinco años».
Las familias pudieron pasar unos 30 minutos con los hombres, que luego fueron llevados a revisiones médicas en un hospital, donde permanecen.
«Fue muy emotivo y algo con lo que había soñado durante años», dijo la esposa de Toledo, Carmen Molinos, que habló brevemente con NBC News el lunes.
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Cómo ocurrió
Añez dijo que los guardias le dijeron a su padre y a los otros presos el sábado por la mañana que recogieran sus pertenencias porque iban a una entrevista. No fue hasta más tarde que se enteraron de que los llevaban al aeropuerto para volver a casa.
Su padre le dijo a Añez que subieron a un avión de PDVSA que los llevó a San Vicente y las Granadinas. Allí se realizó el intercambio de prisioneros y luego subieron a un avión con destino a San Antonio. Una vez que el avión estuvo en el aire, Biden anunció a las familias en Estados Unidos que sus seres queridos volvían a casa.
Alirio Rafael Zambrano, hermano de los presos liberados José Luis Zambrano y Alirio José Zambrano -dos hermanos comparten el mismo nombre de pila- dijo que estaba visitando a sus padres en Houston cuando recibió una llamada del Departamento de Estado el sábado.
Uno de sus hermanos le llamó después desde el avión. Zambrano fue al aeropuerto con sus padres, que tienen más de 80 años, y las esposas e hijos de sus hermanos se reunieron con ellos allí.
Su hermano Alirio conoció a sus dos nietos por primera vez cuando llegaron a San Antonio. «Fue emotivo. Nos abrazamos», dijo Zambrano. «Saludé a todas las familias y abracé a todos los demás presos liberados».
Zambrano dijo que alguien del Departamento de Estado se dirigió a todos, y luego se tocó el himno nacional.
Más del intercambio
Los siete estadounidenses encarcelados fueron canjeados por dos sobrinos de la esposa de Nicolás Maduro, que llevaban años encarcelados en Estados Unidos por condenas de narcotráfico. Franqui Flores y Efraín Campo fueron detenidos en Haití en 2015 en una operación de la Administración para el Control de Drogas y condenados en Nueva York al año siguiente.
El ex cabo de la Marina Matthew Heath también fue liberado. Fue detenido en 2020 en un control de carretera en Venezuela. Osman Khan, de Florida, quien fue detenido en enero, también fue liberado. El Departamento de Estado consideró que todos los hombres habían sido detenidos injustamente.
Una fuente familiarizada con las discusiones entre Estados Unidos y Venezuela dijo que la oferta de intercambio de prisioneros estaba sobre la mesa desde hace unos meses. Representantes estadounidenses visitaron Caracas en junio para mantener conversaciones con funcionarios venezolanos cuando el gobierno de Maduro hizo la oferta.
Al menos otros cuatro estadounidenses permanecen en prisión en Venezuela. Dos boinas verdes, Luke Denman y Airan Berry, que fueron detenidos en 2020 en relación con una redada fallida destinada a derrocar a Maduro, siguen en prisión.
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